El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha pedido "confianza, apoyo, trabajo, dedicación y compromiso" a los diputados y senadores socialistas para el proceso de negociación que comenzará este mismo miércoles con otros partidos para buscar apoyos para ser investido. Pero, además, les ha instado a que, cuando en esta negociación vean "desplantes, arrogancia o propuestas inasumibles" por parte de otros partidos, respondan con "respeto".
Éste es el mensaje que ha lanzado el líder del PSOE a sus compañeros del Grupo Socialista, en la reunión que ha mantenido con ellos en la Cámara Baja horas antes de comenzar las conversaciones con otros partidos, un día después de recibir el encargo del Rey.
"Os pido algo que sé que me vais a dar", ha dicho Sánchez, que se ha comprometido ante sus compañeros a "devolver" esa misma "confianza" y ese compromiso, además de ofrecer "mucha energía e ilusión para hacer realidad ese cambio que tanto desean los españoles".
ESPAÑA RESPIRA "ALIVIADA"
El secretario general del PSOE ha afirmado que ayer "España respiró aliviada y se generó una corriente de esperanza y de ilusión", porque, con el encargo de Felipe VI, se da "salida a un bloqueo institucional" provocado por el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy.
Ahora, ha recalcado que el PSOE tiene que "cumplir" para permitir esa "oportunidad de cambiar las cosas en el país" y "reorientar las políticas, tanto la económica, como la social y la institucional". Por eso, ha defendido, dio un paso al frente y va a tratar que "España tenga lo que se merece, un gobierno lo antes posible".
Así, ha querido lanzar un "mensaje de confianza a la sociedad", como ya hiciera nada más recibir la llamada del Rey, porque "España se puede gobernar desde la moderación, desde el diálogo, impulsando políticas progresistas y reformistas".
LLAMA A LAS "FUERZAS DEL CAMBIO"
Para ello, ha vuelto a hacer un llamamiento a las "fuerzas del cambio", para que se pueda llegar a un acuerdo y el cambio "se haga realidad". Sánchez ha insistido que esta tarea no compete sólo a un líder ni a un partido, sino que es "patrimonio de millones de españoles que votaron por el cambio".
De esta manera, ha recalcado que el cambio no es sólo de políticas, sino también de "formas de hacer política". "El cambio no es 'quítate tú, para ponerme yo', no es hablar de estos sillones", ha subrayado.
Por eso, ha llamado al resto de partidos a "dejar atrás los vetos" y los "frentes", para empezar a hablar de "lo que une", que es "mucho más de lo que separa", que es "el progreso y el cambio". A su juicio, este proceso debe estar presidido por "diálogo, moderación, generosidad, responsabilidad y convicciones", que es lo que, ha dicho, el PSOE va a llevar en su "mochila".
Y como ha insistido en que de lo que se trata es de ponerse de acuerdo en las políticas, ha vuelto a exponer los que son, en su opinión, los cuatro grandes desafíos que hay que afrontar: crear empleo, luchar contra la desigualdad social, luchar contra la corrupción y la crisis de confianza en las instituciones y resolver la "crisis de convivencia" en Cataluña.
Sánchez ha insistido en que estas son sus preocupaciones y los asuntos que pondrá encima de la mesa cuando hable con otros partidos. Por eso, no ha explicado cuáles son sus compañeros de viaje preferidos en este camino y ha remachado que antes de hablar del "con quién" hay que ponerse de acuerdo en el "para qué".
Por lo que se refiere al problema catalán, sí ha querido responder al PP, que "amenaza" con que un gobierno socialista podría "romper España". Sánchez ha recalcado que en los últimos cuatro años lo que se ha visto es que ha sido el "inmovilismo" de Rajoy lo que ha provocado que esté "en riesgo" la integridad territorial.
Por eso, y porque en los gobiernos socialistas "nunca" ha habido declaraciones de independencia, ha recalcado que "si alguien en este país puede garantizar una España unida y reconocible en su diversidad es el PSOE".
Sánchez ha terminado su intervención ante sus compañeros --que le recibieron en pie y entre aplausos-- explicando que les necesita "a todos" e insistiendo en que el PSOE tiene que estar "a la altura de las circunstancias" para propiciar ese "cambio de gobierno" por el que han estado trabajando en la oposición estos cuatro años.