A un mes escaso para que lleguen los fines de semana fuertes de comidas de empresas y de amigos para celebrar la Navidad, ya hay una buena parte de los restaurantes del centro de Jerez que han colgado el cartel de completo aun tratándose de negocios con amplios salones. Hablamos, por orden de demanda y de trabajo, de los sábados 17, 10, y 3 de diciembre, en los que encontrar hueco para almorzar o cenar, de la misma forma que el viernes, es casi una misión imposible previa reserva. El lleno por tanto está garantizado y ahora solo esperan que el tiempo acompañe para que la hostelería borde otra campaña navideña como lo lleva haciendo en los últimos años. Las perspectivas en los negocios sondeados por este periódico auguran unas ventas en este sector ligeramente mayor a las del pasado año, o al menos esa es la sensación que tienen los restauradores por el ritmo al que se mueven las llamadas para preguntar si hay disponibilidad, el mismo con el que han realizado las reservas.
“La campaña se presenta un poco más animada que el año pasado”, explican desde El Gallo Azul, donde resaltan el filón que supone para la ciudad la declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) de la zambomba jerezana a la hora de atraer a turistas para disfrutar de esta reuniones tan tradicionales de Jerez. “Nos llaman gente desde Madrid y desde Noruega para venir”, señala el hostelero Javier Villanueva, que tiene claro que de siete años a esta parte “en el centro no hay competidores en el mes más fuerte del año”. Pero no todo se concentra en diciembre, ya hay empresas y personal de locales de restauración o incluso familias y amigos que celebran sus comidas este mes porque en diciembre no tienen disponibilidad o tienen demasiados compromisos, por lo que noviembre también es importante para medir cómo serán las cajas de la campaña navideña.
En Mesón El Asador también auguran una Navidad “movida” a juzgar por las llamadas para reservar la bodeguita privada que tienen dentro. “Llevamos desde octubre guardando días”, señala un camarero, que apunta también al reclamo que tienen los establecimientos para el 24, otra de las jornadas más fuertes, y cómo se está moviendo también el 31 de diciembre durante el día en los últimos años.
Muy cerca, en Albores, el encargado destaca la premura que cada vez más tienen los comensales para asegurarse su mesa y tener opciones de elegir para que su comida no quede relegada al local donde quede espacio. “Los dos meses antes tenemos ya las mesas cerradas”, indica al respecto. Mientras tanto, en La Cruz Blanca también vaticinan que será una Navidad fructífera para la hostelería jerezana, a juzgar por el reclamo de su salón para comidas más numerosas. En su caso el ritmo de reservas aún es despacio pero efectivo. ¿Queda hueco? Sí, aunque cuanto más numeroso sea el grupo, más complicado lo puede tener por lo que aconsejan a los que se lo estén pensando que vayan tomando una decisión.
¿A la carta o menú?Depende del número de personas que se reúnan, pero en la mayoría de negocios coinciden en que por lo general la práctica es que las reuniones más amplias opten por menú de entre 25 a 35 euros con las bebidas incluidas, y las más reducidas vayan a la carta y opten por hacer una selección de platos para hacer una degustación lo más completa posible.
La pista de hielo vuelve a la Plaza del Arenal
El año pasado no pudo ser y la empresa que venía instalando la pista de hielo acabó marchándose. Tras dos años sin uno de los grandes atractivos, pues en 2014 ya se mudó al Parque González Hontoria, este 2016 las negociaciones van por buen camino y el Ayuntamiento de Jerez ya está tramitando la licencia después de que una empresa haya presentado su oferta para la Plaza del Arenal, la ubicación natural de este espacio