Desde que en 2012 la asociación vecinal Centro Histórico de Jerez se reactivara con Alejandro González a la cabeza, este colectivo no ha parado, convirtiéndose en uno de los más activos de la ciudad. Además, desde hace meses sirve también para abanderar los problemas que sufren estos enclaves en toda Andalucía, pues desde Jerez han promovido la creación de la Federación de AVV de Centros Históricos de Andalucía, que también preside González, cuyos primeros pasos es darse a conocer y que las instituciones sepan que tienen que contar con ellos en cuestiones que tanto les preocupan como la controvertida modificación de la Ley de Espectáculos, conocida como la Ley 13/99, que amplía el horario de apertura de los bares.
Para este martes, han convocado una manifestación bajo el lema “Salvemos el Centro Histórico”. ¿Creen que todavía hay solución para este enclave después de décadas de abandono?
—Si no tuviera solución, no merecería la pena salir. Que cada vez hay menos tiempo para solucionarlo, sí. Esperemos que haya margen.
Sin embargo, nunca hasta ahora se había convocado a los vecinos de Jerez a manifestarse por esta causa, ¿por qué ahora?
—Es la primera que se hace aquí y creo que también en Andalucía, en ninguna ciudad de Andalucía se ha hecho una manifestación de estas características. ¿Por qué ahora? Por que estamos viendo que el proceso de deterioro se ha agravado mucho en los últimos tiempos. Eso, unido a las promesas incumplidas y a la poca perspectiva que hay de recuperación y a la poca implicación que tiene la ciudadanía, hace que queramos saber cuánta gente de verdad en Jerez está por la labor del centro histórico y quiere salvarlo. Si la manifestación fuera un referéndum la pregunta sería: ¿está de acuerdo con que el centro histórico está en muy mal estado y cree que hay que actuar urgentemente?La respuesta será ‘sí’ para los que vayan y ‘no’ para los que no acudan. Todo ello sin connotación ideológica.
Pero la experiencia nos dice que el ciudadano no suele ser muy participativo para estas convocatorias, cuya respuesta ha sido bastante escasa cuando se les ha llamado a echarse a la calle contra uno de los graves problemas como es el paro. Teniendo en cuenta esto, ¿esperan una respuesta masiva o simbólica?
—Creo que la campaña que estamos haciendo por las redes sociales y por los medios está siendo bastante buena y está llegando a mucha gente. Yo creo que va a venir bastante gente. Lo que no sé es qué se puede considerar presencia masiva o no, no me quiero hacer una estimación. Desde luego esta es una manifestación para que de una ciudad como Jerez de 200.000 habitantes fueran, aunque sea, 50.000. Es un tema que afecta tanto a todos y y que puede beneficiar tanto a todos que debería ser una convocatoria masiva. Que al final somos 500 ó1.000 pues 500 ó 1.000.
Han dicho que sería bueno que los representantes municipales respaldasen vuestra manifestación, de la que avisan de antemano que es apolítica
—Que vengan sin ningún tipo de emblemas ni siglas. Y, si vienen, ninguno va a encabezar la manifestación, eso lo tenemos claro. Aunque si yo estuviera en su situación y fuera inteligente iría, porque aquí no se está yendo contra nadie. Y si no iría, al menos esperaba en la puerta del Ayuntamiento a nuestra llegada para apoyar la manifestación.
Hablando de políticos...hace un año aprobaron en asamblea denunciar al Ayuntamiento por dejación de funciones a la hora de exigir el cumplimiento de las licencias concedidas para ejercer su actividad a locales de ocio nocturno y discoteca. ¿En qué punto está esa demanda?
—Pues estamos esperando documentación todavía. Ahora empezaremos a reclamar porque ya han pasado seis meses. Necesitamos informes que se han pedido para realizar ciertas resoluciones o propuestas para presentar la demanda.
¿Y qué razón les dan para no facilitárselos?
—No nos contestan. Ya contactaremos con nuestro abogado y veremos de qué manera se expresa esto, no sé si tendremos que ir al Constitucional y denunciar desamparo. Eso está aprobado y y en el momento que se pueda hacer se va a hacer. Tenemos claro que seguramente no irá contra ningún político, habrá que ir contra un técnico, y por eso seguramente nos nos den la documentación, pero la demanda se va a poner ahora, dentro de un año o de cinco.
En más de una ocasión ha tenido que salir a la palestra para dejar claro que no han declarado la guerra a los locales de copas. Pero lo cierto es que en zonas como Plaza Vargas o San Mateo el malestar de los vecinos es patente. ¿Dónde esta la solución?
—La tienen el Ayuntamiento y la Policía. Los dos. La convivencia y el equilibrio es posible pero hay que controlar y hay que sancionar. Lo he dicho muchas veces, con la gran cantidad de negocios hosteleros que hay en el centro histórico, solo tenemos problemas con el 0,05%, aunque la imagen que se pretende proyectar de nosotros es que queremos cerrarlo todo, cuando no es así. Ahora que también digo otra cosa, que si en esas zonas puntuales ni el Ayuntamiento ni la Policía van a intervenir, está claro que vamos a ver enfrentamiento directos entre hosteleros y vecinos que prevemos que pueden ser graves, y no por nosotros, porque no nos vamos a pelear con nadie.
La alcaldesa acaba de anunciar que este me se licitarán la obras de la Plaza Belén. San Blas va a reabrir después de casi una década. ¿Está empezando el centro histórico a ganar “batallas”?
—No es la primera vez que lo escuchamos, ni se han licitado todavía pero creo que esta vez se van a hacer. Lo que tenemos claro es que la zona no gana batallas, nos ceñimos a la zona porque somos vecinos y vivimos aquí, pero quien gana la batalla es la ciudad entera si el centro histórico está bien. Esto no es una batalla, la guerra debería estar ganada antes de empezarse, simplemente si se planifican las cosas bien y se plantea una hoja de ruta que esté fuera de ideologías políticas, no debe de haber problema. Lo de San Blas no es una batalla, sino una abominación, no se debería haber permitido, pero hay que agradecer que este equipo de Gobierno que haga cogido el toro por los cuernos en este sentido y haya conseguido que se vayan a quitar los puntales y abrir la calle, cosa que no han conseguido los dos gobiernos anteriores. Aunque sigue habiendo una responsabilidad oculta; alguien ha permitido que eso se haya puesto y San Blas haya estado cortada 8 años.
¿Pueden marcar estas actuaciones un punto de inflexión en el centro histórico este 2017 ?
—Nadie puede dudar que sin la presión que la asociación de vecinos está ejerciendo desde que se fundó en este aspecto no se hubiera hecho absolutamente nada, ni siquiera se hubiera puesto el tema encima de la mesa. Ahora bien, San Blas no, porque esa actuación había que hacerla, pero Plaza Belén sí puede ser un punto inflexión, si se hace bien, y consiguen que el propietario de casi toda la finca de la Plaza Belén entre por el aro, y rehabilite y se dedique a otras cosas que no sean especular como lleva haciendo estos años.
¿Ven con buenos ojos el proyecto?
—Es el mismo que presentó el PP para el Plan de Actuación. Nosotros vemos con buenos ojos cualquier cosa que no sea lo que hay ahora. Que sea un proyecto que vertebre la zona; lo que no veríamos con buenos ojos es que eso se habilitara como un parking en superficie. Esperamos que se tenga la precaución de ponerle vallas y cerrarlo por la noche porque sino va a ser una inversión que se va a deteriorar a los pocos días.
