“Esta resolución expresa la indignación del pueblo de Honduras y del resto de la comunidad internacional”, dijo el depuesto presidente de Honduras, al dirigirse a la Asamblea poco después de la aprobación unánime de esa resolución.
La resolución condena “el golpe de Estado” ocurrido en Honduras “que interrumpió el orden constitucional y democrático, así como el ejercicio legítimo del poder”, que el domingo sacó de la presidencia a Zelaya.
Los 192 países de la ONU estuvieron también de acuerdo en pedir “la inmediata e incondicional restitución del gobierno legítimo y constitucional del presidente de Honduras, José Manuel Zelaya Rosales”.