El actual vicepresidente primero del Colegio Oficial de Médicos de Jaén, Francisco Fernández Montero, concurre a las elecciones para la renovación de la Junta de Gobierno de la institución colegial, que se celebrarán el próximo 1 de marzo.
Esta situación ha provocado que después de tres décadas, las próximas sean unas elecciones democráticas entre dos candidaturas: la del actual presidente, Emilio García de la Torre; y la de Fernández Montero, especialista en Medicina Interna y durante ocho años vicepresidente con García de la Torre. “Me presento porque el Colegio necesita un cambio y pasa por ser una institución abierta a sus colegiados, interactiva, con ganas de crecer y que ofrezca transparencia en la gestión, ya que hasta ahora no hemos sabido exponer lo que se hacía”, reconoce Fernández.
La presentación de su candidatura no ha estado exenta de problemas, ya que en el último momento uno de sus miembros se retiró. Finalmente tuvo plazo y pudo presentarla. Compuesta por 15 profesionales, ninguno ha tenido responsabilidad en anteriores juntas de Gobierno y todos son “muy competentes”.
Francisco Fernández apuesta por “un Colegio de Futuro al servicio de los colegiados, una institución abierta en la que se potenciará la comunicación”.
Alrededor de dos mil colegiados podrán votar una de las dos candidaturas y las vocalías a la que pertenece.
Francisco Fernández se presenta sólo para cuatro años, pues reconoce que es el tiempo prudencial que un presidente debe ocupar en la institución. Su propuesta es modificar los estatutos del Colegio para que así se recoja.
El equipo de Francisco Fernández lo conforman Piedad Santiago (vicepresidenta 1ª), José Ignacio Peis (vicepresidente 2º), Mariano Cubero (vicepresidente 3º), Esther Salgado (secretaria), Ascensión Arroyo (vicesecretaria) y Vicente Maldonado (tesorero), además de los vocales.
El candidato a presidente realiza una radiografía del sistema sanitario parándose en la Atención Primaria, considerada “la puerta de acceso al sistema asistencial” y en la que “hay que fortalecer su estructura técnica y humana”. Y es que “los problemas hay que solucionarlos desde el centro de salud, para minimizar los ingresos y la asistencia a las Urgencias”, reconoce. De hecho apuesta por la “hospitalización en el domicilio” como fórmula alternativa sólo ante procesos agudos.