Según informó ayer la Delegación del Gobierno en el País Vasco, la operación denominada Buceador II se inició en junio del año pasado a raíz de las investigaciones que el Equipo contra la Delincuencia Organizada y Antidroga de la Comandancia de Guipúzcoa venía realizando sobre las actividades de varias personas vinculadas al tráfico de drogas.
Estas personas ya habían sido investigadas en el marco de otra operación anterior y algunas de ellas habían sido ya detenidas e ingresadas en prisión, aunque estaban en la actualidad en libertad provisional pendientes del juicio.
Las pesquisas de la Guardia Civil se centraron en un principio sobre unos ciudadanos de origen marroquí domiciliados en Azkoitia.
Además de actuar contra estas personas, la Guardia Civil ha practicado quince detenciones en el sur de España donde quedó al descubierto el entramado de actividades y personas dedicadas a realizar los alijos procedentes de Marruecos en las costas andaluzas.
En este caso, la Guardia Civil se ha incautado de varias embarcaciones utilizadas para el tráfico de hachís y ha aprehendido una tonelada de esta droga almacenada en un garaje de Algeciras.
Algunos de los detenidos traficaban igualmente con drogas de diseño (éxtasis), anabolizantes y cocaína, y mantenían relaciones ilícitas con ciudadanos vasco-franceses residentes en poblaciones próximas a la frontera de Irún, varios de los cuales fueron igualmente detenidos en el transcurso de las actuaciones.
Esta operación antidroga se ha saldado además con la práctica de 23 registros en domicilios y lugares cerrados.