“Ejecutar políticas globales de regeneración urbana que integren en un todo el urbanismo, la actividad económica, cultural y residencial” como fórmula para revitalizar la ciudad y su tejido comercial, que cuente con la participación y en la que se impliquen todos los agentes sociales. Este es el eje de la acción de gobierno en Torremolinos, y que el alcalde, José Ortiz, ha defendido como la piedra angular que permitirá el desarrollo real de los centros comerciales abiertos de las ciudades, en el XI Foro Internacional sobre Centros Comerciales Abiertos celebrado en Buenos Aires, y en el que se han inscrito más de 1.900 asistentes de todo el mundo.
Ortiz ha participado en Buenos Aires (Argentina) como invitado en el XI Seminario Internacional sobre Centros Comerciales Abiertos, Tecnología, Financiación, Gestión, invitado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), y la Federación de Centros Comerciales a Cielo Abierto, Cascos Urbanos y Centros Históricos (FCCA). El alcalde ha analizado en este foro internacional, junto con sus homólogos de otras ciudades españolas, el papel de las administraciones locales en el impulso del comercio tradicional en los centros urbanos y ha compartido las acciones en curso en Torremolinos.
Concepto de ‘Creación de Ciudad’
Para el primer edil, la figura de los centros comerciales abiertos y su desarrollo pasa necesariamente primero por “abordarlo desde un concepto global más amplio, como es la ‘Creación de Ciudad’ y la regeneración urbana y su tejido comercial”, ha señalado. En este sentido, ha hecho una invitación a tener una mirada más amplia sobre lo que, como concepto, significa un Centro Comercial Abierto (CCA) como una simple unión de grupos o agentes con intereses en la promoción y dinamización del centro-ciudad.
A este respecto, ha defendido el estímulo de la “interrelación de los intereses comerciales con los turísticos y los intereses generales de la población”. “Si queremos sobrevivir hay que desarrollar políticas que nos sitúen en un camino certero para el crecimiento económico, turístico y residencial. En definitiva para hacer de nuestras ciudades lugares prósperos para la convivencia y la participación. Ciudades atractivas y atrayentes. Y en este camino la figura que juega el centro de la ciudad es vital”.
Los ayuntamientos como impulsores
“Es trascendental que exista un impulso inicial que tenga un reflejo en el corto plazo como única forma de activar la participación ciudadana, ya que esta solo se agiliza cuando el proceso está orientado a un fin y se percibe como algo tangible. Este impulso solo puede venir de la mano de administración que nos representa a todos, contando además con las asociaciones de comerciantes, empresarios y ciudadanos”, ha recalcado.
El alcalde de Torremolinos ha hecho énfasis la necesidad de “establecer una estrategia global” en todas las políticas públicas que condicionen y afecten a la actividad comercial como fórmula para optimizar la gestión del centro urbano, y en este propósito ha enmarcado su acción de gobierno.
Ortiz ha valorado que “el nuevo escenario urbano que diseñará el reputado arquitecto, Salvador Moreno Peralta, significará un crecimiento exponencial para este enclave social y comercial de Torremolinos y permitirá el desarrollo y continuidad de las necesidades de un determinado comercio enquistado en la trama urbana más antigua”.
Cultura de transformación urbanística
“Se trata de ejercer una cultura urbanística transformacional”, ha dicho, y en este punto ha relacionado ante este foro la intervención urbanística integral que se están desarrollando en el núcleo del centro histórico y comercial urbano del municipio.
Después del cierre efectivo del tráfico rodado en la plaza, y pendiente de acometer aún el tratamiento urbanístico que cambiará por completo su fisonomía, los beneficios de esta actuación ya son tangibles. “Hay un sentir muy mayoritario favorable a la peatonalización”. “Tenemos ensayada la reorganización del tráfico y se ha producido una reactivación comercial con un crecimiento de nuevos establecimientos del 55’5 por ciento en la zona objeto de peatonalización en 2016, y un incremento del 28 por ciento en el número de solicitudes de aperturas en la zona peatonalizada y calles adyacentes, solo en los meses de enero y febrero de 2017”, ha señalado como datos.
Más actuaciones en el centro
Esta no es la única actuación prevista en el centro urbano, ha anticipado el alcalde, y en este sentido ha señalado a remodelación del entorno de la Torre Pimentel (icono de la ciudad) y la Cuesta del Tajo, la apertura del Mercado Gastronómico ‘Sabor a Málaga’ en la plaza de La Independencia y la remodelación de la plaza de La Nogalera y la estación del tren de Cercanías como proyectos también inmediatos.
“Una eficaz inversión pública estimulará la inversión privada y también la participación ciudadana, logrando una sinergia en la recuperación física y funcional del centro histórico-comercial que no se lograría de otro modo”, se ha mostrado seguro.
Para el alcalde, “la transformación del centro de Torremolinos en un entorno de calidad urbana y ambiental actuará como tractor de inversiones, promotor de la participación ciudadana, revitalizará la economía y generando una imagen de marca mejorada”.
Las transformaciones urbanas y comerciales en curso favorecerán un alineamiento del cliente con el comercio tradicional, por cuanto “actuamos sobre la oferta para influir en la demanda”; contribuirán a la transformación del destino turístico por lo que supondrá de “mejora de la oferta complementaria que supone el espacio comercial urbano”, “harán una indudable aportación a la diversificación y desestacionalización del destino”, “permitirán crecer en lo económico y en el empleo” y “repercutirá en una mejora de la calidad de vida y la sostenibilidad del municipio”, ha concluido.
