Emilio Gutiérrez Caba, uno de los grandes actores españoles, con más de 50 años en la profesión, considera que esta "es una época dura para el cine español, aunque digan lo contrario", según ha dicho en una entrevista con Efe.
Gutiérrez Caba ha recibido esta semana el Premio de Honor de la Muestra de Cine Latinoamericano de Lleida, en reconocimiento a su amplia y reconocida carrera profesional, con una trayectoria llena de éxitos que ahora, en su madurez, le permite hablar con conocimiento de causa de la profesión y del séptimo arte en España.
No en vano, Gutiérrez Caba, que pertenece a una de las dinastías de actores más prestigiosas de España, ha participado en estos años en más de 80 películas, decenas de obras de teatro y numerosas series de televisión.
"Esta es una época muy dura para el cine español, aunque nos quieran decir lo contrario y nos vendan que se hace mucho cine. Seguramente se hace mucho cine, pero hay que poner entre comillas esto y saber qué cine se hace, cómo se hace y cuál es el resultado final", advierte durante la entrevista.
Y es que, para este veterano actor, que ha hecho películas con directores de la talla de José María Forqué, Carlos Saura, Adolfo Marsillach, Jaime de Armiñán, Pilar Miró, Jaime Chávarri, Pedro Almodóvar, Gomez Pereira o Vicente Aranda, por citar solo a algunos, la calidad del cine español actual deja mucho que desear, principalmente por la prisa con la que se realizan las producciones.
"Sobre todo hay que hacer una comparativa con lo que ha sido el pasado; la memoria es importantísima aunque esté deformada. Yo creo que en arte, en cultura, a veces se puede trabajar a destajo, pero no tiene que ser un procedimiento que ocurra normalmente", subraya Emilio Gutiérrez Caba.
"Si la gente de producción de dirección o nosotros trabajamos 14 horas" al día, el resultado no es el mismo, no es bueno", añade en este sentido.
"Yo no digo que se tenga que hacer como lo hacían en los años sesenta los americanos, que podían estar meses y meses haciendo una película, que te suspendían el rodaje, pero las tonterías que existen hoy en día, de explotación, eso es algo indefendible, inaceptable, pues se están aprovechando cobardemente de una situación económica para imponer unos sueldos y unas posibilidades de trabajo inaceptables", denuncia.
"Me preocupa mucho mi profesión, los niveles de paro son altísimos y eso es algo que no acepto ni comparto. Por eso he sido y soy muy beligerante con el Gobierno, porque creo que en cuestiones de impuestos ha sido especialmente malo para la profesión y no ha dado más dinero a las arcas del Estado", añade el actor.
Gutiérrez Caba reclama por ello que se aplique también al cine la rebaja al 10 % para los espectáculos en directo porque, de no hacerse, "se está primando que vengan otras cinematografías".
El actor continúa trabajando, como siempre, a pesar de que en los últimos meses un problema en la cadera le ha obligado a cancelar una gira programada en el teatro. Ya más recuperado, explica sus planes para el futuro.
"Tengo proyectos en el teatro, empiezo en abril a ensayar una obra de Ingmar Bergman sobre el hecho del teatro en sí y las relaciones entre director y actores que puede ser sorprendentes para el espectador", explica Gutiérrez Caba.
"Luego tengo un proyecto lírico en septiembre con Charo López y un tenor, una soprano y orquesta sinfónica sobre la relación de Puccini y su madre", avanza el actor, que también tiene planes cinematográficos, uno con Julio Médem, con el que empieza a rodar en agosto.
Se trata de proyectos que se sumarán a su dilatada carrera, de la que él mismo destaca a dos directores ya fallecidos como son Pilar Miró y José María González Sinde. "Tengo cariño especial a los que ya no están entre nosotros. Son directores que confiaron en mí para sus óperas primas, y eso siempre es muy de agradecer", explica.
Otras películas le han marcado a nivel personal: "Me quedo con unos cuantos títulos, seguramente no llegan a la media docena, pero son muy importantes para mí, sobre todo por la gente con la que he trabajado, como 'Nueve cartas a Berta', 'La caza', 'La colmena', 'La comunidad' o 'Réquiem por un campesino español'".
En cualquier caso, asegura que no ha habido ninguna película que por sí sola cambiara su carrera, como tampoco ha tenido un solo amor.
"Creo que es un conjunto de películas las que le van cambiando a uno, el acumular experiencia, pero eso no solo me lo da el cine, me lo da el día a día. Me siguen admirando y sorprendiendo las cosas que veo, y diría que estoy viviendo en un mundo del que formo parte, pero al mismo tiempo me siento como un poco ajeno a él", concluye el actor.
