La activista antidesahucios china Ni Yulan, paralítica desde 2002 a causa de una paliza policial, ha sido agredida y desalojada de su vivienda a la fuerza junto a su familia, denunció hoy a Efe la afectada.
Unas treinta personas se presentaron en su vivienda en Pekín el pasado día 15 a las 23.00 hora local y les sacaron de "la cama" a la fuerza, cuenta por teléfono Ni Yulan desde comisaría, donde permanece desde entonces junto a su marido y su hija.
La activista y abogada explica que los agresores, a quienes vincula con la policía de su barrio, les metieron en una camioneta y les robaron todas sus pertenencias: desde el carné de identidad hasta los móviles o dinero en efectivo.
"Comenzamos a gritar '¡socorro!', pero habían amenazado a los vecinos para que no nos ayudaran", recuerda Ni, que ya acumula tres desahucios forzosos este mismo año, nueve desde 2013.
Ni asegura que la Policía no comenzó a "trabajar en el caso" hasta que varios diplomáticos estadounidenses se acercaron a hablar con ella en la comisaría donde duermen días después, pero de momento han avanzado poco en la investigación.
"No se ha producido ningún arresto. Los agentes nos han dicho que estaban tratando de hablar con estas personas (los supuestos agresores) para que nos devolvieran nuestras cosas y nos dieran una compensación", señala la activista, conocida por su defensa de los derechos de las víctimas de desahucios y demoliciones forzosas por la especulación inmobiliaria.
Ni Yulan lamenta que se repita esta situación una y otra vez, y lo atribuye al activismo que protagoniza junto a su marido, Dong Jiqin, por el que fueron encarcelados en el pasado.
"Vamos a seguir alojándonos en comisaría, porque, como no tenemos carné de identidad ni dinero, no tenemos a donde ir", manifiesta la abogada, galardonada con el Premio Internacional para Mujeres con Coraje por el Departamento de Estado de EEUU y con el Tulipán del Gobierno holandés por su compromiso con los derechos humanos.