Efectivos antidisturbios se desplegaron en todo el centro de la capital, y en especial en torno a la verja que delimita el campus, donde lanzaron gases lacrimógenos para reprimir a los congregados, explicaron testigos.
La manifestación había sido prohibida por las autoridades, que habían advertido que las fuerzas de Seguridad, apoyadas por grupos de milicianos Basij, mostrarían la misma contundencia que han empleado para impedir las recientes protestas contra la polémica reelección del presidente, Mahmud Ahmadineyad.