Una vez conseguido el “milagro” de la salvación en lo deportivo, la pelota se encuentra ahora en el tejado del propietario, el Ayuntamiento capitalino. Por el acuerdo con Hacienda para el desbloqueo de las cuentas del club y la venta de las acciones a un nuevo propietario pasa el futuro más cercano del Recreativo de Huelva, una entidad que iba como un barco a la deriva y que poco a poco va encauzando su camino a base del trabajo de puertas para adentro del consejo de administración, empleados y futbolistas.
Para hablar del pasado, presente y futuro del Decano han estado esta semana en la tertulia, que organiza Viva Huelva en la céntrica taberna Guatiné, el presidente del Recreativo, Manolo Zambrano; el entrenador Juan Manuel Pavón, el capitán Jesús Vázquez y el fiel seguidor recreativista Manuel Obel, acompañados por el periodista del portal Huelva24 Mario Asensio.
El acuerdo con Hacienda y la venta van de la mano y están “muy cercanas”. Ese es el mensaje de tranquilidad del presidente recreativista para la afición, ya que “el pliego de condiciones existe, con la Agencia Tributaria se ha avanzado bastante y hay cinco o seis interesados en hacerse con el club”.
Eso sí, “el sentido común me dice que no habrá trajes a medida para quien se haga con el Decano” debido a que “el Ayuntamiento tiene una doble patata caliente: una la venta y otra a quién se lo vende”, porque “lo que está claro es que no podemos volver a los errores del pasado y esta entidad no puede permitirse otro engaño”.
Zambrano no ha querido decir la cuantía al céntimo de la deuda del Recreativo pese a que ya dentro del consejo de administración y la propiedad lo sepan. Eso sí, aproximadamente siete millones de euros son necesarios para levantar el embargo que pesa en el club albiazul.
El presidente cree que “no hay prisas para vender y al primero que pase no será”, aunque, por otro lado, espera que el 30 de junio deje de ocupar el cargo. “Yo en esa fecha estaré peleando a favor del Recreativo ya sea desde dentro o desde fuera: desde fuera sería una buena noticia porque ya habría un nuevo dueño, y desde dentro sería por las circunstancias y habría que seguir arrimando el hombro”, ha confesado.
“Quiero que llamen un día y me digan que todo está solucionado tanto con Hacienda, como con la Seguridad Social y que ya se haya podido vender”, ha incidido Zambrano, quien le pide al Ayuntamiento que “esté muy seguro de a la persona o personas que le entrega el decano del fútbol español”.
Un pasado cargado de vicisitudes
Y si la actualidad en el Recreativo se centra ahora en su porvenir institucional es debido a que deportivamente se ha podido salvar pese a los mil y un episodios trágicos en los últimos tiempos. La herencia del exmandatario Pablo Comas ha dejado muchas secuelas, “muchos obstáculos que el consejo de administración tuvo que ir sorteando”.
“Cualquiera podría haber pensado en este tiempo en un final feliz como triste. No hubo una línea recta y el club ha tenido que sortear muchos obstáculos. Al final todos hemos remado en la misma dirección y conseguimos salvar la categoría”, ha comentado el presidente recreativista.
La permanencia llegó en la penúltima jornada tras ganar al San Fernando, un partido que “era de vida o muerte” y que se sacó adelante “gracias a un cariño y un respaldo de la afición difícil de olvidar”, según el capitán Jesús Vázquez.
Para Manuel Obel, el choque del pasado domingo fue “inolvidable” y una “locura”, porque “se me ponen los vellos de punta de recordar cómo estaba el estadio y lo bonito que fue el recibimiento de los jugadores”.
Pero para llegar hasta aquí el camino fue largo. Los problemas económicos conllevan impagos “y a vivir de la caridad” en muchas ocasiones, según ha confesado Zambrano. Y aún así, el equipo ha competido y se ha dejado la piel en los campos de Segunda B para lograr la permanencia. “Había mucha gente joven que no estaba preparada para estas dificultades. Tiene mucho valor lo que hemos conseguido y los jóvenes han demostrado lo que hay que tener para evadirse de todo y ser conscientes de que había que ir a cada campo a ganar”, ha manifestado Jesús Vázquez, quien ha tenido que hacer labores como de limpieza de ropa, transportar balones, realizar labores de mantenimiento y todo “por el amor a unos colores”.
Para el técnico Juan Manuel Pavón la permanencia tuvo dos puntos de inflexión. “El primero fue el choque contra el Marbella, que llegaba líder a Huelva y supimos competir, y el otro fue cuando no se pudo fichar a nadie en invierno y nos miramos las caras y confiamos en ir hacia adelante todos juntos”.
Lo que cuenta es que se consiguió el objetivo pese “a jugar mejor o peor”, según Pavón, quien dice tener “mucha incertidumbre” con el futuro y que ante la posibilidad de que este domingo ante el Cartagena sea su último partido en el banquillo del Decano, afirma que todo dependerá de “lo que diga el presidente a partir de la semana que viene”.
No un adiós, un hasta pronto
Por otro lado, Jesús Vázquez anunció su retirada de los terrenos de juego después de ser el jugador que más veces vistió en la historia del Decano las barras azules y blancas. “Ha sido un proceso largo y todos los años valoraba si seguir o no. Después de analizarlo mucho es lo mejor. He sufrido mentalmente y lo he pasado mal pero creo que por piernas sí podría seguir”, ha explicado el capitán, quien seguirá ligado de cierta forma al club decano entrenando a los jóvenes.
Eso sí, esta leyenda viva del recreativismo dice que todavía le queda lo peor y no ha asimilado su retirada definitiva del verde. “El bajón me entrará realmente cuando vuelva de las vacaciones, el Recre entrene de nuevo, juegue amistosos, el primer partido de liga y ahí no esté”.
Para sobrellevar el cese del sueño de ser futbolista, Zambrano ha comentado que “ahora empezará lo bueno para él y podrá disfrutar de sus hijos. Es una nueva etapa y unas nuevas rutinas”.
