La linense Davinia Cuevas, conocida artísticamente como Davinia, lleva seis meses promocionando su cuarto disco de estudio, Casita de Muñecas, cuya gira de conciertos arrancó oficialmente el pasado mes de marzo en Madrid y sobre en la que en próximas fechas se confirmarán citas como Málaga, Sevilla o Valencia. Pese a haber vivido varios años fuera, el amor por su tierra no ha hecho otra cosa que acrecentarse.A sus 32 años, asegura haber llegado a su momento de madurez musical,
Su anterior trabajo, ‘Una nueva ilusión’, se editó hace siete años. ¿Qué ha sido de usted en todo este tiempo?
—Desde Una nueva ilusión he sido mamá. Tengo una hijita que tiene ya cinco añitos, y he estado formándome como persona. Al empezar tan joven -me pilló todo con 18 añitos-, enlazando conciertos y promociones. No te da tiempo a nada. Necesitaba parar, como digo, formarme como persona y encontrar el camino a seguir, con qué tipo de música quiero seguir, por aquí quiero seguir mi carrera...Llegó el momento en que necesitaba tomarme ese par de añitos para coger muchísimas energías y afrontar esto con la máxima positividad.
Llevan ya seis meses de promoción del disco y tienen dos sencillos en el mercado, ‘Casita de Muñecas’ y ‘Cómo me gusta’. ¿Cómo está viviendo el proceso?
—Muy contenta. Echaba un poco de menos el trajín. He estado un tiempo retirada de los escenarios, pero no de la música. Ha estado formándome, ensayando, y tenía muchas ganas de empezar de nuevo con esto de las promociones, los escenarios…. He tenido suerte de que, a pesar de haber estado unos años sin sacar un nuevo trabajo, cuando he puesto en el mercado Casita de Muñecas los fans han respondido muy bien. Tenía muchas ganas y no esperaba que ellos tuvieran tantas ganas de escuchar algo nuevo de mi, pero en cuanto empecé a dar indicios de novedad, lo esperaron.
El proceso de producción del disco ha sido largo...
—Hemos tenido la suerte de poder dedicarle un año y medio, porque hoy día las producciones son en plan: “venga, vamos, en tres meses el disco fuera”. En este caso, mi compañía, Guillermusic, me ofreció la posibilidad de grabar con ellos, y yo, además, tenía ya muchas ganas de trabajar con Chico Valdivia. Había escuchado trabajos con él y me gustaba el sonido que tenía. Trabajar en este disco es un proceso que me ha encantado. Es el disco en que más me he involucrado desde el principio en la elección de temas, buscando sonidos, dándole la forma , las letras, con Emi Luna que, además, como Chico, es también de la tierra, y hemos hecho un gran equipo los tres. El disco está grabado entre estudios de aquí de Algeciras, la preproducción en el estudio de Chico, el de Guillermusic en La Línea, Madrid y Málaga, pero el tema de las voces está metido en los estudios de Guillermusic. Es, quizás, mi disco más personal, más maduro, más cuidado en todo y en el que más me he volcado. Eso se nota a la hora de que tienes que subirte al escenario y defenderlo.
¿Hasta ahora no contaba con esa libertad creativa?
—Yo siempre he tenido casi libertad a la hora de elegir temas, pero siempre bajo directrices. En este disco, la compañía me dejó total libertad para hacer lo que quisiera, y así es el resultado. Casita de Muñecas es un disco para sentarte, escucharlo, de los que a mí me gustan. Siempre tienes ese miedo de cuando llegue al público. Lo mismo a mí me gusta, pero a ellos no les llega. Pero me he dado cuenta de que aún se valoran las letras con mensaje, que es algo que me gusta muchísimo, que te llegue. Siempre comento que en este disco, hay asuntos, como el desamor, en los que se ve desde dos puntos de vista la ruptura de la pareja. Hay un tema,Enamórate, que es como diciendo que el amor no se termina,que se convierte en otra cosa, y luego otro, Eco de una voz, que muestra la separación desde el punto de vista de “te has quedado sola, se ha ido, ya no va a volver”. De un mismo tema se pueden sacar varios.
Los temas este disco representan tal variedad de sentimientos y estados de ánimo que casi se diría que es en sí mismo una personalidad múltiple . ¿Con qué tema se siente más identificada?
—Pues, ahora mismo, yo creo que quizás con Del derecho y del revés, porque es muy optimista, y porque a nivel personal y profesional estoy en un momento muy bueno. O Cómo me gusta, el single que está sonando ahora y también es muy positivo. Es curioso, porque habla de un momento previo a la relación en el que todo está en tu cabeza, es fantástico. Luego te puede salir rana, pero en ese momento todo lo que imaginas es bonito. No te imaginas discutiendo con tu pareja ni nada por el estilo.
Será la primera gira que viva su niña de cinco añitos...
—Yo soy la madre, la madura, y tenía muy claro que una vez me metiera en este mundo, sería viajes para arriba, viajes para abajo. Pero en verano no tiene cole y me la puedo llevar. Si no, se queda aquí con su padre, sus abuelos, mi hermana, y ella lo lleva muy bien. Es lo que hay. Los gajes del oficio.
Aún hay pocas fechas señaladas en su gira. ¿Para cuándo La Línea, Algeciras...?
—Por aquí queremos venir a partir de otoño, porque La Línea, Algeciras, Campo de Gibraltar en general, es cita obligada, es donde me habéis visto nacer, y desde que empecé en esto de la música he sentido apoyo. Tenemos conciertos hasta finales de año. Córdoba es lo más inmediato, también en Málaga, en Sevilla, en Valencia... Ayer precisamente tuve la reunión con el manager.
Aún hay fechas que no están cerradas, pero por Málaga espero estar entre el 15 y el 20 de junio. Después de 13 años, ¿le siguen parando en La Línea?
—Sí. Sobre todo cuando entré en el programa, fue un boom. Era cruzar la calle Real y echar cola. Llega un momento en que se ve con naturalidad. Siempre me muestran mucho cariño.
En su día, optó por ir a Eurovisión. ¿Hoy lo haría?
—Tendría que valorarlo. Desde el tema que tenga delante para defender en el escenario hasta la puesta en escena, que yo hago hincapié en que en eso fallamos siempre. La espinita no la tengo porque tuve la opción de defender a España . La espinita no fue ir, sino que nos quitaron el primer tema que tenía, Mi obsesión, que fue el que ganó el Second Chance, que hasta ese momento solo había ganado David Bisbal. Esa fue mi manera de quitarnos la espinita. Quizás no pudimos llevarla a Eurovisión, pero demostramos que cuando nos enfadamos fue por algo.
¿Sigue en contacto con sus compañeros de OT3?
—Ya con esto del whatsapp, el facebook... es raro el que no tenga el famoso grupo de whatsapp. A la presentación de Madrid vinieron algunos de ellos, me han dicho me gusta esta canción o la otra. Cuando estamos cerca unos de otros, estamos pendientes y si hay oportunidad te acompañan.
Para terminar, ¿qué se van a encontrar todos sus fans cuando la vean sobre el escenario?
—Se van a encontrar con una invitación a abrir conmigo esa cajita de muñecas. Cada habitación es un mundo y cada mundo una canción. Seguro que pasaremos un ratito muy bueno, como siempre.
