El Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, dijo hoy que prevé un aumento del volumen de las quejas que recibe su oficina según avancen las negociaciones de la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), debido a la incertidumbre que generan en territorios como Gibraltar o La Línea.
"(El nivel de reclamaciones) va a ir subiendo porque esto no ha hecho más que empezar. Veremos escenarios muy distintos, porque si no sabemos por qué carril se va a empezar a negociar no podemos saber los resultados que puede haber", explicó Maeztu a Efe.
El Ombudsman andaluz participó en la Conferencia de la Red Europea de Defensores del Pueblo, que se celebra hoy en Bruselas, en la que se examinaron los daños colaterales para los ciudadanos del "brexit" y del auge del populismo en Europa.
Maeztu recordó que la celebración de la conferencia coincide con el comienzo de las negociaciones entre Bruselas y Londres para determinar los términos del divorcio entre ambos bloques, unas conversaciones que el Ombudsman calificó de "interesantes y preocupantes".
El defensor del Pueblo Andaluz subrayó que Andalucía es, tras la Comunidad Valenciana, la segunda región de España con mayor número de residentes británicos.
"Tenemos una situación de turistas y de pensionistas mayores de 65 años, especialmente en la Costa del Sol, tenemos la situación del campo de Gibraltar, con un Peñón que tiene un estatuto especial, y al mismo tiempo toda la política agroalimentaria del resto de Andalucía", indicó el Ombudsman andaluz.
Maeztu recalcó el "peso significativamente importante" de la región andaluza en la negociación del "brexit", si bien señaló que los ejes de trabajo de las conversaciones son aún desconocidos y esto dificulta el análisis de las consecuencias de la salida británica del club comunitario.
"No sabemos sobre qué condiciones o qué líneas de trabajo van a negociar el Reino Unido y la UE", advirtió Maeztu, que aseguró que el papel de los defensores del pueblo europeos debe centrarse en la defensa de los derechos de los ciudadanos.
"Tenemos que ver cómo se pueden garantizar los derechos de los trabajadores de la comarca del campo de Gibraltar y también de los españoles que trabajan en Reino Unido, que además son mayoritariamente jóvenes", dijo el Ombudsman andaluz.
En este sentido, Maeztu instó a "no ser catastrofista" pero señaló que el proceso "va a provocar mucha demanda de información", por lo que será importante garantizar la transparencia en las negociaciones para generar certidumbre.
"El empleo, los derechos sociales y la forma de vivir de cada día van a estar en cuestión según se negocie de una forma flexible o dura. Tenemos mucho trabajo por delante", concluyó el defensor.