Ello no supone que Luque fuese a pasar más tiempo en la Comisaría, sino la aplicación de un supuesto legal conocido como la detención judicial, por la que la titular del Juzgado de Instrucción número 1, responsable del caso, contará con tres días más para que se practiquen al sujeto análisis forenses que corroboren si se encuentra alterado en sus facultades mentales y es, por tanto, inimputable.
Según la información a la que ha tenido acceso este diario, hay además “numerosos flecos” por resolver dentro de la investigación que está llevando a cabo la Unidad contra la Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV). Uno de los más importantes sería, en base a estas fuentes, determinar desde dónde se efectuó el disparo que atravesó el corazón de Montiel.
De los resultados del análisis forense practicada al cadáver se desprende que había “mucha pólvora” en la espalda de la víctima, lo que podría dar idea de que el tiro pudo haber sido disparado a bocajarro en el garaje del fallecido -e incluso por la espalda-, y no desde la ventana, como aseguraba en sus declaraciones el acusado.
Asimismo, se están recabando todos los testimonios posibles entre los vecinos del fallecido y su verdugo, una tarea que está resultando complicada a causa del “miedo” derivado de la impresión que causaron los hechos. Fuentes policiales afirmaban que Luque había declarado, en un primer momento, que “se le escapó el tiro”, para después manifestar que no habría podido matarlo porque lo consideraba un confidente y un amigo. Además, el presunto asesino habría señalado a un sobrino suyo como la persona que había cargado la escopeta, comentaron estas fuentes.
Juzgado
Estaba previsto que ayer, entre las 14.30 y las 15.00 horas, pasase a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 Francisco Luque, donde se aplicará el periodo de 72 horas máximo perteneciente a la detención judicial para la recopilación de pruebas.
Francisco Luque pasó casi nueve horas atrincherado en su vivienda después de disparar a su vecino, el ex policía Juan Montiel. Finalmente, los Grupos de Operaciones Especiales (GOES) lograron sacarlo ileso tras un intenso tiroteo en el que disparó más de 40 proyectiles.