El tenista español Rafa Nadal, número uno del mundo, venció por 6-3, 3-6 y un tercer set en tie-break (11-9) a un combativo Jack Sock, vigésimo primero en el circuito, en un gran encuentro de individuales de la Copa Laver.
Nadal consiguió así dar dos puntos al equipo de Europa, que en el total aventaja por 7-1 al equipo del resto del Mundo.
Desde el principio ambos jugadores restaron muy bien y apenas cometieron errores no forzados, lo que llevó a largos y atractivos intercambios.
Sock se mostró muy agresivo e hizo gala de sus golpes directos a media altura, un gran juego cruzado y de saber rebañar bolas difíciles con su poderosa muñeca.
Nadal consiguió romper el segundo saque del jugador de Nebraska, para acto seguido perder el suyo, aunque a continuación volvería a robar el servicio a su adversario, momento que aprovechó para marcar distancias en esa primera manga.
A pesar de las posiciones en el ránking y diferencia de años, el encuentro estaba técnicamente muy igualado, con un estadounidense sin nada que perder y que plantó cara con descaro al de Manacor, por lo que el partido aventuraba un desenlace en los detalles.
Como en el séptimo juego de ese primer parcial, que deparó algunas puntos memorables de Nadal, entre ellos algunas dejadas magistrales en la red, que fueron aclamadas con entusiasmo por el público.
En el segundo set, Nadal se esmeró en el saque, para tratar de solventar pronto sus juegos, mientras que Sock tuvo que arriesgar cada vez más para mantener su servicio, y volvió a perderlo en el tercer juego.
Pero el norteamericano no se daba por vencido: tras robarle el saque a Nadal en el cuarto juego e igualar el luminoso, se puso por delante y prosiguió su escapada, hasta llegar a un parcial a su favor de 5-2 y ganar el set, 6-3.
Sock, relajado y sonriente, quería celebrar su 25 cumpleaños con un éxito en este torneo, y el recital que dio ante Nadal hizo que el duelo tuviera que decidirse en un "match tie-break".
El americano sufrió una aparatosa caída en el cuarto punto de ese decisivo desempate, pero ni aun así se dio por vencido, y mantuvo las espadas en alto.
"Estoy contento porque son otros dos puntos para Europa. Esto nos da mucha confianza, porque tener ventaja es importante", dijo Nadal al acabar el partido.
El español dijo también que el dobles de esta noche junto a Roger Federer va a ser "especial", ya que es la primera vez en sus vidas que juegan juntos esa modalidad.
"Va a ser muy especial para los dos. Pelearemos juntos y lo esperamos con ilusión", añadió el mallorquín.
Fue el quinto cara a cara entre Nadal y Sock, y como en todos los encuentros anteriores, también este tuvo como vencedor al español, que se desquitó de su derrota en dobles de la víspera, cuando jugó al lado del checo Tomas Berdych, y tuvo enfrente al dúo Jack Sock/Nick Kyorgis, cediendo el primer punto al colectivo mundial.
Sock, vencedor de dobles en Wimbledon en 2015 y medallista en Río de Janeiro, volverá a verse las caras esta noche en el dobles junto a Sam Querrey frente al esperado tándem Nadal/Federer.