El viceprimer ministro de Bélgica y responsable de Economía, Kris Peeters, se ha desmarcado este martes de la presencia del expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, en Bruselas y ha considerado que cuando un líder llama a la independencia "más vale quedarse cerca de su pueblo".
"No quiero prejuzgar nada, pero cuando se pide la independencia, más vale quedarse cerca de su pueblo", ha declarado Peeters en una entrevista con la cadena pública flamenca VRT.
El democristiano flamenco (CD&V) ha abogado por conservar la "cabeza fría" y esperar a ver qué anuncia Puigdemont en la rueda de prensa que tiene previsto ofrecer a las 12:30 horas en la sede de una asociación de prensa internacional en el barrio europeo de Bruselas.
El expresidente llegó el lunes a Bélgica pero evitó en todo momento ser visto en público y no se informó de su agenda, aunque más tarde se supo que el abogado Paul Bekaert, conocido en España por haber defendido a varios etarras detenidos en Bélgica, se había reunido con él y va a ejercer como su abogado en el país.
En declaraciones a Europa Press, Bekaert confirmó que recibió a Puigdemont en su despacho, en la localidad de Tielt, a una hora en coche al norte de Bruselas, y que asumía su defensa en Bélgica, aunque no quiso aclarar si su defendido baraja solicitar el asilo en este país.
El secretario de Estado de Asilo e Inmigración, el nacionalista flamenco (N-VA) Theo Francken, abrió la puerta el pasado domingo a la posibilidad de que Puigdemont solicitara la protección internacional.
El primer ministro, Charles Michel, por su parte, reprendió a Francken, al que pidió "no echar más leña al fuego" y negó que el asunto estuviera en la agenda del Gobierno.