Entre otros han acudido el delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, y el presidente del Ejecutivo autonómico, Juan Vicente Herrera, y parte de los asistentes al responso han tenido que seguir la ceremonia desde la calle, dado que la capilla se encontraba abarrotada.
El sacerdote oficiante ha comenzado su homilía afirmando que “la muerte siempre duele, pero más cuando es una muerte gratuita y premeditada, como esta”.
En el altar se podían ver dos fotos del guardia civil de 28 años de edad en los equipos de fútbol sala en los que jugó, ya que era un gran aficionado a este deporte.