La Junta de Gobierno de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Clemencia, Nuestro Padre Jesús de la Caída, Santa María Magdalena y María Santísima del Mayor Dolor celebra este año el 425º aniversario de la bendición de la talla del Santísimo Cristo de la Clemencia.
Ha sido la imagen que ha presidido el Vía Crucis del Miércoles de Ceniza y la Cuaresma para sus cofrades está siendo preparatoria para un Martes Santo (27 de marzo) muy esperado.
El Gobernador de la Cofradía, Pedro Estepa, confirma que este año no habrá ningún estreno especial, únicamente invitarán a autoridades jienenses a acompañarles en la procesión del Martes Santo. “Cualquier punto del itinerario es bonito, pero especialmente la salida, el paso por Millán de Priego, que es nuestra carrera oficial, y la vuelta al barrio desde la plaza de Santa María”, reconoce Pedro Estepa.
Recientemente han presentado el Cartel Extraordinario del 425° Aniversario de la bendición del Santísimo Cristo de la Clemencia. Es obra de la pintora jienense Trinidad de la Casa Adán, hija de uno de los cofundadores de la Cofradía. En él ha recogido la esencia de la Imagen que en 1593 realizó Salvador Cuéllar.
Los próximo días 22, 23 y 24 de febrero las Charlas Cuaresmales ‘Clemencia’, en el salón parroquial Santa María Magdalena, a las 20:15 horas. Este jueves se impartirá la charla ‘Clemencia, significado bíblico’, impartida Francisco de la Torre Tirado, párroco de la Iglesia San Juan de la Cruz de Jaén y Arcipreste ‘Nuestra Señora del Valle’, especialista en textos Bíblicos. Consiliario de la hermandad, fue párroco de Santa María Magdalena.
El Vicario General de la Diócesis de Jaén y Deán de la Santa Iglesia Catedral de Jaén y de Baeza, Francisco Juan Martínez Rojas, será el encargado de impartir la charla del día 23, que llevará por título ‘Clemencia, significado histórico’.
Finalmente, el día 24 de febrero, la ponencia sobre el significado iconográfico de Clemencia correrá a cargo de Carmen Bermúdez Sánchez, Licenciada en Bellas Artes en la especialidad de ‘Restauración’. A lo largo de su trayectoria, ha realizado diversas restauraciones para la parroquia de Santa María Magdalena que hoy se pueden ver en la misma, así como a las imágenes. Destaca la importante restauración realizada al Santísimo Cristo de la Clemencia, descubriendo diversa policromía oculta, y el paño de pureza que hoy se observa en su talla. La última y más importante restauración fue la llevada a cabo en 1988, recuperando el esplendor actual del Cristo.
