Los vecinos de la avenida Muñoz Vázquez y de la zona del Paseo de Andalucía y Plaza España insisten en que el estado de deterioro que sufren sus viviendas es consecuencia de la rotura de redes de suministro y, tal vez, de saneamiento de aguas. Esta situación, que aparentemente tiene su origen en la calle Reina, afecta a la citada avenida y a su entorno, visiblemente hundido como pueden apreciar los arcenses que pasan por el lugar. Un ejemplo es el hundimiento cada vez más pronunciado de la Plaza España, cuyo monumento central presenta una clara inclinación.
Los afectados entienden que existe buena voluntad por parte del alcalde y de su equipo de Gobierno, pero, sin embargo, le ruegan encarecidamente que se lleve a cabo una profunda actuación en la zona, es decir, en toda la avenida Muñoz Vázquez, para interrumpir el hundimiento y rotura de las viviendas. Es más, consideran que la empresa Aqualia, concesionaria de la gestión del ciclo del agua en Arcos, debe ejecutar una obra con vistas al futuro sustituyendo la obsoleta red de cemento por otra más flexible que soporte los movimientos del terreno. En este sentido, consideran que la zona lo merece por encima de otras inversiones previstas, en alusión al depósito de agua de la Cuesta de la Escalera. En esta última obra la empresa tiene previsto invertir más de 800.000 euros, cuando con 600.000 se podría reparar las redes en pleno centro urbano, ya no por una cuestión de estética sino de seguridad.
En nombre de los afectados, Juan Armario asegura que su vivienda, a pesar de contar con una importante losa de hormigón para evitar la rotura del edificio en caso de desplazamiento de los terrenos, tiene cada vez más problemas y grietas; situación que comparten decenas de familias que viven en la zona. Asimismo, asegura que los sótanos que se han permitido construir a lo largo de la avenida han actuado como puntos de almacenamiento de agua sin dejarla correr de forma natural, efecto que también atribuyen al parking del Paseo. En este sentido, asegura que todo Arcos conoce la existencia de un arroyo subterráneo que siempre corrió por el lugar y que ha sido obstruido con edificaciones. Como ejemplo, citan también cómo el edificio del antiguo bar Terraza está cada vez más hundido.
Recientemente se pudo observar cómo el edificio de la agencia de viajes Valenzuela mostraba al descubierto incluso su cimentación rota, que ha sido simplemente parcheada por una cuestión de estética, sin que por ello el inmueble esté cada vez más inclinado. Lo mismo ocurre con la conocida zapatería contigua y el resto de edificios.
Además, los vecinos afectados se muestran muy molestos con la carta que han recibido en la que se les confirma que la empresa Aqualia no tiene responsabilidad alguna en el deterioro de sus viviendas porque es un problema de índole geológica, no de la construcción en sí de las redes. Sin embargo, insisten en que no es así, que la red de suministro es muy antigua, de cemento, y que por ello aparecen en las viviendas “aguas claras” que teóricamente es agua potable, es decir, que procede de la red de suministro.
A esta situación de gran gravedad se le podría sumar el estado del aparcamiento de las viviendas de la calle Reina, donde da miedo entrar porque da la impresión de que en cualquier momento se puede derrumbar a tenor de las grietas, rotura de pilares y el apuntalamiento que manifiesta.
Apoyo político
Los vecinos comparecieron este miércoles nuevamente en el Paseo de Andalucía acompañados de Ai-Pro, cuyo concejal Leopoldo Pérez ha pedido igualmente al equipo de Gobierno que exija a Aqualia que, en vez de construir el depósito de agua de la Cuesta de la Escalera -proyecto que no es urgente- realice la obra pertinente en Muñoz Vázquez, lo cual, como ya avanzó hace unos días el ejecutivo, podría superar un coste de 600.000 euros. En todo caso, esperan una respuesta positiva del Ayuntamiento porque se trata de una zona clave en el centro urbano por donde todo vecino de Arcos pasa alguna vez al día, amén de ser un espacio de carácter comercial y de servicio.
