"Esto no ha sido vandalismo; han ido a por los coches de ese señor y nos atreveríamos a decir que los culpables no son ni del barrio”. Las declaraciones a Viva Jerez de esta vecina de Vallesequillo II, que prefiere mantenerse en el anonimato, evidenciaban este jueves por la mañana el enfado y la indignación de los residentes de los bloques de pisos de la plaza Plácido Fernández Viagas de esta barriada después de una noche demasiado larga.
Los hechos se producían entre las tres y media y las cuatro de la madrugada, cuando dos vehículos de alta gama y estacionados en batería en dos hileras diferentes salían ardiendo en una acción presumiblemente intencionada. Fueron las alarmas de los coches estacionados y las espectaculares llamas las que alertaron a los residentes, que comenzaron a salir de sus casas preocupados, especialmente los que tenían los turismos aparcados junto a los vehículos que estaban ardiendo. Lo tenían claro: tenían que retirar sus vehículos como fuera, incluso arriesgando su propia vida, pues en un vídeo remitido por los lectores a Viva Jerez se aprecia el caso de un vecino que se dispone a montarse en su coche rápidamente, mientras el que está justamente al lado tiene toda la parte delantera completamente ardiendo e incluso se aprecia el ruido de varias explosiones al alcanzar el fuego el depósito del combustible.
El conductor finalmente puede retirarlo, pero hubo otros coches más cercanos a los vehículo afectados que sufrieron daños. Los vecinos tienen pocas dudas. Iban a por el propietario de estos vehículos, una persona “muy querida en el barrio” que ha regentado una tienda de chucherías. “No ha sido porque la familia sea mala, al contrario, son gente buena que tienen buena relaciones y él vende coche de segunda mano. Estaba llorando y lamentando que estaban jugando con el pan de sus hijos”, señala esta vecina, que lamentó que esta acción haya puesto en riesgo la vida de los residentes. Hasta la zona, además de los bomberos, se desplazó la Policía Local, mientras que la Policía Nacional ha abierto una investigación por el suceso.
“Podría haber sido una desgracia”
“Menos mal que había una acera entre la zona de los coches y las viviendas; podía haber ocurrido una desgracia”, se lamenta una vecina de Vallesequillo II, que denuncia el peligro al que se expusieron los residentes para retirar sus coches ante el temor de que el fuego les alcanzara”.
