El Pleno municipal aprobó este jueves la refinanciación de deuda viva por un importe total de 594 millones de euros, acogiéndose así el Ayuntamiento a unas medidas adoptadas el pasado mes de marzo por el Ministerio de Hacienda.
El Gobierno local contó con el respaldo de Ciudadanos, Adelante Jerez y Ganemos Jerez; mientras que el PP se abstuvo al primero de los puntos y votó en contra del segundo de ellos.
La operación va a permitir ampliar a diez años el periodo de amortización de los préstamos que en su día se acogieron a los sucesivos planes de pago a proveedores, con dos años iniciales de carencia.
Además, el reagrupamiento de toda esa deuda implicará una reducción significativa de los tipos de interés, que estarán “muy por debajo del 1 por ciento”, según apuntó la teniente de alcaldesa de Economía, Hacienda y Recursos Humanos, Laura Álvarez.
La propia Álvarez defendió que el 70 por ciento del capital afectado por diferentes préstamos verá reducido los tipos de interés, si bien todavía no es posible concretar un volumen de ahorro total porque el Estado está pendiente de fijar el tipo definitivo, que será más bajo cuanto mayor sea el número de ayuntamientos que se acojan a estas medidas del Ministerio de Hacienda.
El concejal del grupo popular Jaime Espinar justificó la negativa a apoyar la iniciativa de esta formación política en la “hipoteca para el futuro” que supone la operación, que retrasa a 2045 el fin del periodo de amortización.
Según Espinar, se trata por tanto de “una patada hacia adelante” que no solventa el problema financiero del Ayuntamiento de Jerez, que a su juicio pasa por reducir su volumen de deuda “cuanto antes”. “Se trata de gestionar para bajar la deuda, pero no para seguir alargando los plazos de pago”, sostuvo.
El portavoz de Ciudadanos, Manuel Méndez, destacó por su parte que la operación “es buena” desde el punto de vista financiero “porque soluciona problemas de Tesorería”, pero demandó “una política complementaria” que atienda la raíz del problema económico del Consistorio.
En esta línea, el portavoz de Adelante Jerez, Raúl Ruiz-Berdejo, consideró “positiva” la operación porque supondrá “un balón de oxígeno” para la Tesorería, pero quiso dejar “claro” que no va a solucionar “los problemas estructurales” que lastran la gestión económica municipal. “Tenemos una amenaza en 2021 ó 2022, cuando tengamos que empezar a pagar los créditos y quizá entonces necesitemos otros balones de oxígeno”, argumentó.
En este sentido, tanto Ruiz-Berdejo como la portavoz de Ganemos Jerez, Kika González, advirtieron de que “quizá” haya llegado el momento de empezar a reivindicar “una quita” para la deuda municipal, “porque si no no habrá nunca manera de arreglar esto”. “Estamos pagando una deuda impagable”, subrayó González.
Ruiz-Berdejo esperó que en el futuro el Ministerio de Hacienda muestre una mayor “sensibilidad” hacia ayuntamientos que se encuentran en situaciones “extremas” como el de Jerez.
