El plazo para presentar enmiendas finaliza el próximo martes y los grupos apurarán los plazos para plasmar su disconformidad, a través de esas enmiendas a la totalidad, de devolución o parciales, con los dos textos enviados por el Gobierno a las Cortes.
Se trata del proyecto de ley que regula el sistema de financiación de las comunidades de régimen común y Ceuta y Melilla y el de la reforma de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (Lofca).
El nuevo modelo fue apoyado por todas las autonomías gobernadas por los socialistas y por Canarias, Cantabria y la ciudad de Melilla, en tanto que las del PP, incluida la ciudad de Melilla, se abstuvieron en la reunión del pasado 15 de julio del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).
Según el acuerdo, el sistema tendrá cuatro fondos: de garantía de servicios públicos fundamentales (se incluyen sanitarios, educativos y sociales), de suficiencia global, de cooperación y de competitividad para reducir las diferencias de financiación per cápita.
Dota de mayor autonomía financiera y corresponsabilidad fiscal a las autonomías, ya que contarán con una mayor capacidad normativa y un mayor porcentaje de impuestos cedidos: el 50% del IRPF y el IVA, y el 58% de los Impuestos Especiales, según el Gobierno.
Además, contará con una cantidad adicional de 11.700 millones de euros.
En declaraciones a Efe, el portavoz de Economía del PP, Cristóbal Montoro, ha confirmado que presentarán sendas enmiendas contra los dos textos remitidos por el Gobierno, ya que el sistema no aporta suficiencia financiera, ni garantiza la igualdad a los ciudadanos en el acceso a los servicios públicos.
Agregó que constituye un agravio comparativo entre las comunidades y supone “un apaño” para el tripartito de Cataluña, “que está contra la pared”.
Por todo ello, no van a entrar en “batallas parciales”, ya que tienen en la cabeza "un sistema alternativo”, que Montoro no quiere desvelar.
