La Consejería de Educación y Deporte garantiza la alimentación en la provincia de Córdoba de 3.100 alumnos en riesgo de exclusión de 144 centros educativos de 56 localidades, en el marco de las medidas aprobadas por el Consejo de Gobierno para paliar los efectos del cierre de los centros educativos por el decreto del Estado de Alarma provocado por el coronavirus.
Según ha indicado la Administración autonómica en una nota, el servicio "está funcionando con normalidad", con un seguimiento que permite que los menús que no son recogidos por las familias sean distribuidos a otras familias a través de los servicios sociales de los ayuntamientos.
El 16 de marzo, el primer día lectivo que los comedores escolares estaban cerrados como consecuencia de la declaración de Estado de Alarma por parte del Gobierno central, el Consejo de Gobierno aprobó la tramitación de emergencia del suministro de comidas para el refuerzo de alimentación infantil.
Esa misma semana comenzó la distribución para los alrededor de 18.000 alumnos andaluces incluidos en el Plan Syga durante el curso, que incluye alumnado de infantil y primaria de centros públicos en riesgo de exclusión social, y a los que les proporciona tres comidas diarias.
El seguimiento permanente de la situación social y en colaboración con la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, se acuerda la ampliación de la medida a 1.000 alumnos andaluces más de la red pública y unos 1.900 de la red concertada con planes de compensación educativa, con lo que el 30 de marzo casi 21.000 alumnos en riesgo de exclusión estaban recibiendo esa atención por parte de la Junta de Andalucía.
La distribución de alimentos se mantuvo en el periodo vacacional de Semana Santa, algo que no habría ocurrido en condiciones normales del curso. El miércoles 8 de abril, en plena Semana Santa, el Consejo de Gobierno aprobó la inclusión de alrededor de 11.000 alumnos más, con lo que los menores beneficiados superan ya los 31.000 en Andalucía (3.100 en la provincia de Córdoba).
El alumnado que está recibiendo esta atención es el que ya estaba identificado como en riesgo de exclusión social cuando se suspendió el comedor escolar, y se han ido incorporando a más alumnado, a petición de los servicios sociales, hasta que se han arbitrado ayudas directas a las familias. En ningún caso la identificación está vinculada al porcentaje de bonificación en el comedor escolar que se pueda establecer durante el curso escolar normal en los distintos servicios complementarios.