Miembros del AMPA Mar de Leva del IES Saltés de Punta Umbría han traslado este martes sus protestas desde el núcleo costero hasta la capital onubense en un último intento a la desesperada de lograr una reacción por parte de la Delegación de Educación.
Sin embargo, no ha podido ser. Sus quejas por la falta de medidas de “seguridad” en el instituto para hacer frente al Covid han caído en saco roto y tras una semana de protestas, aunque no tiran la toalla, sí entienden que sus hijos no pueden estar eternamente sin acudir a clase y está previsto que este miércoles se retome la actividad docente en el centro.
Así lo ha explicado Mariló Luque, portavoz del AMPA, a las puertas de la Delegación, donde han protagonizado una sonora protesta: “No nos rendimos pero no podemos asumir que las semanas y los meses pasen sin que la Administración cumpla con su obligación y sin que nuestros hijos asistan a clase y reciban la educación a la que tienen derecho”.
En esta línea, lamentan que “tanto ellos (los menores) como nosotros conviviremos con este terrible virus en unas condiciones muchísimo más peligrosas de lo necesario debido a la dejadez de funciones de las administraciones”, de modo que “la Delegación de Educación de Huelva es la responsable máxima”.
Por su parte, la alcaldesa de Punta Umbría, Aurora Águedo, ha acompañado al AMPA en su concentración y ha asegurado que el Ayuntamiento apoya sus reivindicaciones porque “solo piden lo normal, una educación segura”.
También ha recordado que el Consistorio ha ofrecido espacios municipales para habilitar aulas, dado que en algunos casos la ratio va “de 28 a 35 alumnos”, pero “ofrecer espacios significa que Educación tiene que contratar profesores, si no, estamos en las mismas”.