Tan segura está de ello que no se corta a la hora de manifestar que "la libido mueve el mundo, hacia adelante y hacia atrás. Para bien o para mal".
"A veces, cuando reprimimos nuestra libido, también retrocedemos. Pusimos a Dios en el centro de nuestra sociedad y la gente se olvidó de su propia naturaleza y de sus deseos", explica la colombiana.
A sus 32 años, la cantante está más cómoda que nunca con su aspecto físico y afirma sentirse cada vez más segura consigo misma con el paso del tiempo.
"Cada día descubro algo nuevo. Atravieso fases en las que me siento mucho más en contacto con mi lado femenino, mucho más de lo que jamás hubiera pensado. Estoy dejando que la mujer dentro de mi hable y que los deseos de esa mujer se expresen todo lo fuerte que puedan", explica la artista.