Cuatro de cada diez menores no cumplen con las recomendaciones de sueño de lunes a viernes, una realidad que afecta sobre todo a los adolescentes, ya que más de la mitad duerme menos horas de las recomendadas entre semana, según datos del estudio PASOS 2019 de la Gasol Foundation, que evalúa a niños y niñas de entre 8 y 16 años en España.
La falta de horas de sueño se asocia con una probabilidad de más del doble de presentar sobrepeso u obesidad a lo largo de la infancia y adolescencia, según ha informado este viernes en un comunicado la fundación de los hermanos Pau y Marc Gasol, con motivo del Día Mundial del Sueño este viernes.
Según el estudio, el promedio de horas dedicadas a dormir es menor cuando mayor es la edad del niño, ya que es de 9,88 horas para los estudiantes de tercero de primaria y de 7,78 horas para los de cuarto de la ESO, lo que supone una diferencia del tiempo dedicado a dormir de 2,1 horas entre semana.
Durante el fin de semana, el incumplimiento asciende hasta el 48,1%, y, al contrario de lo que ocurre los días de entre semana, es la población infantil la que más incurre en esta falta de sueño (52,2%) frente a la población adolescente (44,6%), que entre semana no llega a las ocho horas diarias de sueño recomendadas.
Sin embargo, este incumplimiento de las horas recomendadas se debe, en mayor medida, a un exceso de horas de sueño, en contraste con el incumplimiento de lunes a viernes, que suele darse por una falta de horas de sueño, según ha indicado la fundación, que ha recordado que "dormir es fundamental para seguir un estilo de vida saludable".
El responsable de Programas de la Gasol Foundation, Santi F. Gómez, ha afirmado que "los niños y niñas que no duermen las horas recomendadas tienen desregulaciones en el mecanismo hormonal que regula la sensación de hambre y saciedad, lo cual les puede llevar a ingerir más calorías de las que necesitan".
De la misma manera, ha añadido Gómez, "el sueño contribuye en gran medida a consolidar los aprendizajes del día y mejora la atención y reduce la irritabilidad" y tiene un papel fundamental respecto a la actividad física ya que ayuda a recuperar la energía necesaria para moverse, jugar y disfrutar.
"Este papel tan importante del sueño se refleja en nuestros programas de promoción de vida saludable dirigidos a niños en situación de vulnerabilidad, en los que trabajamos con un enfoque holístico y ayudamos a las familias a descubrir los beneficios y las claves para conseguir una noche llena de sueños reconfortantes", ha dicho.