La estrategia que está ultimando la Junta de Andalucía a partir del 9 de mayo, cuando decaiga el estado de alarma, incluye que no haya toque de queda en la comunidad, una apertura gradual de la actividad comercial en dos fases y el cierre de municipios con alta incidencia bajo autorización judicial. Aún así, el comité de expertos se reúne este jueves para tomar las medidas necesarias tras el estado de alarma.
El presidente de la Junta, Juanma Moreno, ha avanzado este miércoles algunas de las principales líneas que seguirá el plan que va a poner en marcha el Ejecutivo a partir del domingo, con el que pretenden llevar a cabo una “desescalada progresiva” en la región, y por lo tanto, la provincia de Huelva dirá el domingo adiós al toque de queda.
El toque de queda decae con el estado de alarma porque la comunidad no tiene competencias y, aunque lo avale el Tribunal Supremo, Andalucía sólo lo pondría en marcha “si las condiciones epidemiológicas así lo recomiendan” por un rebrote en la comunidad que haga que se vuelva a entrar en una zona de mucho riesgo.
“Ahora mismo la incidencia está bajando, no veo razones para ese toque de queda”, ha dicho Moreno en respuesta a los periodistas durante la presentación de nuevos medios materiales del Infoca.
Ha advertido sin embargo de que si hay un rebrote y Andalucía está “en zona de riesgo” utilizará “todos los instrumentos” al alcance de la Junta y no dudará en tomar las decisiones necesarias “por muy duras que sean”.
En cuanto a los horarios de los negocios, se está estudiando una “apertura progresiva de la libertad comercial”, en dos fases, hasta que exista la seguridad de tener inmunizado al 50 o 60% de la población andaluza.
En el caso de los municipios con tasas de incidencia superiores a 500 o 1.000, la Junta pedirá autorización judicial para su cierre perimetral, “para evitar que pasen al municipio de al lado y les contagien”, ha explicado.
Por otro lado, Moreno se ha mostrado “optimista” para llegar al verano con un nivel de vacunación de alrededor del 50-60%, junto al 10-12% de inmunizados por pasar la Covid-19, una cifra que “nos permitiría tener unas vacaciones estivales normalizadas y, por tanto, recuperar la actividad económica”. “Esta es la primera semana con una cantidad importantísima de vacunas, cerca de 600.000, lo que supone un salto cuantitativo importante”, ha apuntado.