Los alumnos y alumnas del colegio de la Compañía de María que se encontraban retenidos en su hotel de Palma de Mallorca por la situación de los brotes de la covid-19 entre estudiantes en la isla balear, llegaron en la noche de este domingo al hotel-covid donde permanecen aislados.
Dos de las alumnas de este grupo que se han erigido, en cierto modo, en portavoces del resto de sus compañeros de viaje, narran a Radio La Isla y San Fernando Información como están viviendo el día a día de lo que se ha convertido en una auténtica odisea.
Eso sí, lo primero que quieren es agradecer el trato que desde el primer momento han recibido por parte de la agencia de viajes y del personal del hotel Cassandra, en el que han permanecido los primeros días hasta que ayer finalmente fueron trasladados al hotel covid de referencia en Mallorca.
“Actualmente no estamos en contacto con nadie, solo por el móvil y también entre los balcones. Incluso nos dejan el desayuno en la puerta”, afirma una de las afectadas, quien además añade que, tras dar negativo en antígenos, están a la espera de que en las próximas horas les den el resultado de una nueva PCR a la que se han sometido todos los alumnos y alumnas llegados desde la localidad isleña.
Un poco más calmadas que en la jornada del domingo, donde se originó todo el revuelo, en la jornada de este lunes señalan que sienten mucha “incertidumbre”, puesto que “nadie nos ha informado de los motivos por los que estamos aquí, ni cuánto tiempo vamos a estar”, añadiendo que “ni sabemos si tendremos que guardar cuarentena en Mallorca o si nos mandarán para casa”.
Defienden a capa y espada que en ningún momento han estado en el festival de reggaetón que ha desencadenado el macrobrote en distintos sitios de España, ni tampoco en macrobotellones. Es más, se encontraban de viaje en dirección a Mallorca cuando se produjeron ambos. “Lo único que hemos hecho desde que llegamos han sido actividades náuticas el pasado sábado”.
