La Policía Local de Alcalá la Real está llevando a cabo en una campaña de control y vigilancia especial de furgonetas programada por la Dirección General de Tráfico. Desde el pasado 26 de octubre hasta el próximo día 31 se establecerán puntos de control donde los agentes comprobarán las siguientes cuestiones relacionadas con la seguridad vial: uso del cinturón de seguridad; permiso de conducir del conductor; permiso de circulación del vehículo; Inspección Técnica de Vehículos en vigor; Seguro Obligatorio de responsabilidad civil; Presencia de alcohol en el conductor.
Desde la DGT se señala la importancia de enfocar durante una semana la atención a las furgonetas, un tipo de vehículo cada vez más presente en vías urbanas e interurbanas debido en parte, a la necesidad de reparto que ha originado el fuerte crecimiento del comercio electrónico.
Además, en vías urbanas se produce el 57% de los accidentes de furgonetas. Uno de cada cuatro ocupantes fallecidos de estos vehículos no utilizaban el cinturón de seguridad en el momento del accidente. El 10% de las furgonetas implicadas en los accidentes mortales en vías interurbanas tenían la ITV caducada.
Muchas furgonetas carecen de espejo retrovisor interior que, unido a las grandes dimensiones de este tipo de vehículos, hacen que el campo de visión se reduzca la visión trasera y haya ángulos muertos. Al no llevar tacógrafo ni limitadores de velocidad, sus conductores pueden conducir muchas más horas, lo que hace que pueda aparecer la fatiga y cansancio con más frecuencia. El estrés, las prisas y manejo de dispositivos electrónicos producen distracciones durante la conducción. La distracción es el primer factor concurrente en los accidentes con víctimas en los que está implicada una furgoneta.
Por otro lado, la altura de las furgonetas hace que el centro de gravedad sea más alto y les hace inestables y sensibles a los vientos laterales. No sobrepasar la masa máxima autorizada y distribuir bien la carga ayudará a una mejor estabilidad del vehículo y mayor efectividad en la frenada.
Debido al uso habitual de estos vehículos, suelen presentar mayores índices de defectos en los neumáticos. Es imprescindible comprobar regularmente la profundidad del dibujo. Se recomienda que la profundidad de las ranuras tenga como mínimo 3 milímetros. El límite legal es de 1,6 milímetros.
