Un juez de El Ejido (Almería) se hará cargo de la investigación sobre el hallazgo de más de 3,6 toneladas de cogollos de marihuana en bolsas que fueron encontradas en una finca ubicada en el barrio de Pampanico de la citada localidad y que habría sido promovido por una sociedad mercantil bajo un aparente cultivo de cáñamo industrial.
La investigación de una plantación en una explotación agrícola de Villa del Prado (Madrid) llevada a cabo por un juzgado de Navalcarnero dio lugar a destapar los almacenes ubicados en El Ejido, donde los agentes de la Guardia Civil encontraron además 781 secaderos de cogollos colgantes y 195 cajas de cogollos más, según recoge un auto consultado por Europa Press que da las competencias al juzgado ejidense para instruir el caso.
Según se desprende de la investigación, las semillas empleadas para la plantación madrileña habrían sido proporcionadas mediante un contrato de colaboración por la entidad que operaba en Almería, la cual, según la investigación judicial, "carece de autorización para realizar plantaciones de cannabis en territorio nacional, ni de uso medicinal ni industrial".
Las pesquisas judiciales efectuadas por el juzgado instructor ejidense apuntan que la entidad, "mediante pretendidos cultivos de cáñamo industrial" habría estado "cultivando y vendiendo cogollos de marihuana en fincas situadas en diferentes territorios", entre ellos la finca investigada en la Villa del Prado.
Entiende al respecto el Tribunal Supremo que pese a estos indicios, no se han aportado aún diligencias que pudieran vincular que los productores de semillas y plantones participen también del cultivo desmantelado en la localidad madrileña, con lo que descarta una conexión entre los delitos y estima que se investiguen por separado.
