El servicio de montaña de la Guardia Civil ha detectado, a raíz de la pandemia, "un ligero repunte" de rescates de montaña en Andalucía. El dispositivo más importante de la comunidad autónoma, el Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (Greim) de Granada, ha contabilizado 83 rescates en lo que va de este 2023, lo que supone igualar la cifra de 2019. En 2022 se hicieron 102.
Así lo han manifestado fuentes de la Guardia Civil en declaraciones a Europa Press, donde han apuntado que este aumento puede darse debido a que tras la pandemia, la sociedad "valora más el contacto con la naturaleza", lo que hace que se practiquen más deportes de montaña como senderismo o barranquismo, por lo que se incrementan los rescates.
Según han indicado, Sierra Nevada en Granada es la zona donde "son más frecuentes los rescates por razones evidentes", ya que en este sistema montañoso es donde hay mayor número de senderos, barrancos además de la estación de esquí y, por ello, se encuentra el dispositivo "más importante" de rescate de la Guardia Civil en Andalucía.
Aunque en la sierra granadina es donde mayor número de incidentes se producen, en cualquier zona de sierra de Andalucía ocurren rescates como en la zona de Jaén, Sierra Morena, así como en algunas zonas de la Sierra de Cádiz o la Sierra de Huelva.
La Guardia Civil ha hecho hincapié en que, "afortunadamente", los incidentes más frecuentes suelen ser de "carácter leve" como torceduras o esguinces producidos por deslizamientos en algún sendero, lo que provoca que las personas no puedan continuar y al ser lugares montañosos de "difícil acceso" la Guardia Civil tiene que efectuar un rescate.
En verano también son frecuentes los incidentes por deshidrataciones, ya que el excursionista no es consciente de que hace deportes de montaña y olvida hidratarse.
Uno de los últimos rescates de este grupo tuvo lugar el pasado domingo con el rescate de una joven barranquista que, al saltar a una poza en el río Verde, se hizo daño en la espalda. Dos especialistas trataron de llegar hasta ella mediante el helicóptero, pero el fuerte viento reinante lo imposibilitó, por lo que debieron acceder a pie hasta la zona y, tras extraerla del lugar del accidente, transportarla en camilla hasta su transferencia en ambulancia, lo que les llevó un total de ocho horas.
Ya en la temperada invernal se dio un repunte de rescates en esta provincia contabilizándose medio centenar, lo que supuso un 65,5% más que el año pasado, concentrándose la mayoría de ellos en Monachil, Capileira y Güéjar Sierra.
