6.163 usuarios han utilizado el Punto Limpio desde su inauguración

Desde hace varios meses, concretamente en el mes de mayo, comenzó a funcionar en este municipio el nuevo servicio de Punto Limpio, por este motivo, el concejal de Medio Ambiente, Antonio Alba, ha hecho balance del funcionamiento del Punto Limpio Municipal, ubicado en el Polígono Industrial ‘La Zorrera’, desde su apertura hasta la fecha.

Alba ha indicado que el número de usuarios que han utilizado desde su puesta en funcionamiento el Punto Limpio Municipal, ha sido de 6.163.

Igualmente quiso reseñar que durante este periodo el número de Kilogramos depositados de residuos eléctricos y electrónicos ha sido de 69.684. Además también se han depositado 3.601 Kilogramos de ropa usada, 776.165 kilogramos de muebles y enseres, 36.020 kilogramos de chatarra, 105.280 kilogramos de restos de poda, 219.530 kilogramos de escombros, 261.300 kilogramos de papel y cartón, 360 litros de aceites vegetales, 1.600 de aceites minerales, 90 kilogramos de lámparas y fluorescentes, 1045 kilogramos de baterías, 40130 kilogramos de vidrio, 3.570 kilogramos de envases, etc…

Por tanto, el edil de Medio Ambiente quiso agradecer públicamente la buena acogida que está teniendo el Punto Limpio Municipal entre los conileños y sobre todo valoró muy positivamente la conciencia medioambiental de los ciudadanos que han hecho utilización de este servicio municipal. Asimismo, aprovechó la ocasión para recordar que el Punto Limpio Municipal, presta servicio de lunes a viernes, de 10.00 a 14.00 horas, en horario de mañana y de 16.00 a 19.00 horas en horario de tarde. Los sábados permanece abierto de 08.00 a 13.00 horas.

Punto limpio
El objetivo básico es el de separar los residuos peligrosos generados en los hogares para evitar que acaben en los cubos de la basura impidiendo su reciclado. Además el Punto Limpio permite el reaprovechamiento de los materiales mediante un reciclaje directo con el consiguiente ahorro energético.

El sistema de funcionamiento, así como los residuos admisibles y las cantidades máximas permitidas, quedan estipulados a la entrada del recinto. Un operario verifica y clasifica las mercancías que traen los vecinos, y les indica los lugares de descarga de las mismas, sin que comporte riesgo alguno para el usuario en el manipulado. Para ello los contenedores se encuentran clasificados y señalizados no dando lugar a equívoco. Los particulares pueden acceder tanto a pié como en vehículo