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Miércoles 18/12/2024
 

Andalucía

‘Selma’: ¡¡¡Grita libertad!!!

Los villanos de la función están, además, revelados en toda su tosca e inconmensurable brutalidad y transmiten una enorme verosimilitud en sus composiciones...

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La realizadora y guionista afroamericana Ava DuVernay, cosecha del 72, ha escrito y dirigido este largometraje de 123 minutos, que recoge uno de los más importantes pasajes de la biografía del reverendo y luchador por los derechos civiles, Martin Luther King. Es decir, las marchas sobre la ciudad sureña de Selma y, desde ella, hasta el capitolio de Montgomery. El 7 y el 21 de marzo de 1965, respectivamente.  Dos eventos cruciales para que se garantizara el voto a la ciudadanía estadounidense de color -algo que ocurrió pocos meses después- porque aún siendo teóricamente legal, las cortapisas en los Registros eran insalvables para ell@s.

‘Selma’ comienza con la entrega del Nobel de la Paz al protagonista en octubre del 1964. Un año antes, se produjo la explosión de una iglesia baptista, que provocó un miembro del siniestro Ku-Klux-Klan, y que mató a cuatro niñas negras, de entre 11 y 14 años de edad. En este contexto histórico, inscribe DuVernay la compleja y tupida red de acontecimientos y relaciones en torno al líder y su entorno. Desde el presidente citado, hasta el FBI -con el turbio J. Edgar Hoover al frente -que intervino sus teléfonos y  le mantuvo continuamente vigilado, registrando sus actividades y movimientos. Dichas comunicaciones telegráficas literales son incisivamente mostradas en la cinta.

Pero también las relaciones con otros activistas, con quienes compartía ciertos objetivos, pero no estrategias. Tales como Malcolm X, por ejemplo, asesinado un mes antes de las marchas, en febrero del 65. O el Black Power. O movimientos estudiantiles mucho más radicales. O miembros de otras confesiones religiosas y partidos de izquierdas. O con su mujer, Coretta Scott King, una figura clave en su vida personal y política.

Todas estas imbricaciones están muy bien resueltas, desde el punto de vista narrativo. Incluso a nivel de las altas esferas del poder. Nada chirría, nada resulta gratuito, ni esquemático, ni farisaico. Los villanos de la función están, además, revelados en toda su tosca e inconmensurable brutalidad y transmiten una enorme verosimilitud en sus composiciones. Lo mismo cabe decir de las escenas de masas de los racistas jaleando las actuaciones policiales.

Una vez dicho esto, hay que resaltar que la realizadora se supera a sí misma filmando las dos marchas citadas, de una manera tan poderosa como emotiva. Ambas tuvieron lugar en domingo. En la primera, calificada como domingo sangriento, tras cruzar el tristemente famoso puente de Edmund Pettus en protesta por el asesinato de un activista no violento, seiscientas personas desarmadas fueron ferozmente agredidas por los llamados agentes del orden.

DuVernay retrata a esos hombres y mujeres de su raza como lo que eran. Personas con una enorme dignidad. Con una valentía a toda prueba. Decidid@s a llegar hasta las últimas consecuencias, por conseguir la plena ciudadanía y los derechos más elementales. No solo al líder. A tod@s ell@s. Y a su gesta desgarradora de mantenerse firmes en su no violencia, frente a la barbarie de sus enemigos.
Por contra, la segunda -dos semanas después -vibrante y con sabor a victoria. Absolutamente multitudinaria, con las imágenes reales de la época, en paralelo a las de la ficción, en las que reconocemos a, por ejemplo, Sammy Davis Jr o a Harry Belafonte y, por supuesto, a Mahalia Jackson, la voz favorita de Luther King.

Bradford Young la ha fotografiado. La música se debe a Jason Moran y Morgan Rhodes. Su tema, ‘Glory’ se hizo con el Oscar 2015 a la Mejor Canción. Tom Wilkinson, especialmente,  Giovani Ribisi, Dylan Baker, entre un largo etcétera, le prestan su talento. Carmen Ejogo y, sobre todo, David Oyelowo, bordan a los protagonistas, con los que guardan un pasmoso parecido físico. Los acontecimientos descritos en ella solo tuvieron lugar hace 50 años.

Una pertinente, necesaria, intensa y entregada epopeya de la lucha de un hombre visionario, de una etnia oprimida, que debatiremos el próximo jueves -esta vez, como excepción, será el jueves -9 de abril, junto a ‘Maps of the stars’, de David Cronenberg en nuestra próxima tertulia de cine. Una mirada de mujer sobre la memoria histórica de l@s suy@s, que merece ser vista.

http://sevillacinefila.com/

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