Ciudadanos celebra el "gesto" del Gobierno de Susana Díaz al aceptar ayer la renuncia del viceconsejero de Salud y del gerente del SAS como tapón a la crisis desatada en la gestión de la sanidad pública. El partido de Albert Rivera atribuye la caída de esos dos altos cargos a "la presión de la calle", pero su líder en Andalucía, Juan Marín, ha desvelado hoy una llamada telefónica que realizó el sábado al propio consejero, Aquilino Alonso, y que en algo pudo contribuir a que finalmente se aceptasen las dimisiones. En ese diálogo, el portavoz parlamentario de C's reclamó explicaciones sobre la ruptura de toda negociación con las plataformas sanitarias y preguntó "qué había pasado". "No me pongo medallas, pero el PSOE debe saber que los tiempos de rodillos han acabado", describió de forma gráfica.
Dos días después, el lunes, la diputada y portavoz de Salud de la formación naranja, Isabel Albás, anunciaba que su partido reclamaría "dimisiones" si la crisis no se solucionaba. También planteó la posiblidad de solicitar un Pleno en el que se votasen resoluciones, lo que obligaría a los grupos a retratarse y podría haber dejado al PSOE solo en la Cámara. El martes el Consejo de Gobierno aceptaba las renuncias. Marín niega haber "forzado" esas renuncias y atribuye la victoria "a las mareas". Según su versión de lo ocurrido, Ciudadanos "ha hecho su trabajo a través del diálogo" con el Ejecutivo regional, pero no en forma "de pacto". El toque de atención existió, pero se intenta rebajar a mera recomendación y no presión. "Aquí alguien llevaba el paso cambiado. El Gobierno no va a llevar siempre la razón y así se lo hemos dicho", subrayó. El apoyo de los de Rivera es clave en el Parlamento andaluz para los socialistas, que sin ellos quedan en una peligrosa soledad.
Marín recuerda que fueron los primeros que solicitaron la comparecencia del consejero Alonso en el Parlamento, algo que ocurrirá esta misma tarde, para que dé explicaciones sobre la crisis en su departamento tras las protestas ciudadanas y más ahora con las renuncias de dos de sus pesos pesados. También cree que "era positivo cambiar de interlocutores", en referencia al viceconsejero y al gerente del SAS ya fuera del organigrama de la consejería, y alerta de que decidirán si retoman la petición de Pleno con propuestas de resolución tras escuchar hoy a Alonso. "Nadie nos marca el paso", ha reiterado retomando el argumento que repite su partido desde hace semanas.
También celebra que "por fin", aunque con "mes y medio de retraso", la Junta haya dado el paso definitivo para derogar los decretos que pusieron en marcha las fusiones hospitalarias, el germen de todas las protestas en la calle. Eso sí, ni las renuncias en la cúpula de Salud ni haber entrerrado el proyecto convence al 100% a Ciudadanos, que alerta de que "no se ha solucionado el problema de la sanidad" porque "sólo se ha abierto una ventana".