Modesto González es alcalde andalucista del municipio sevillano de Coria del Río, donde ha logrado dos mayorías absolutas, y desde hace semanas es el nuevo líder de Andalucía Por Sí, un partido político que quiere irrumpir con fuerza en el Parlamento andaluz en las próximas elecciones. Cree que ha llegado el momento de convertir al andalucismo en el referente político con mayúsculas para Andalucía. A falta de pocos días para celebrar el 28F, el Día de Andalucía, González lidera un proyecto político que “genere poder” para los andaluces.
Modesto González pretende recuperar el “sentimiento andalucista”, aquel que se echó a la calle para exigir su autonomía hace ya 40 años, aquel que se envuelve en la bandera verde y blanca y aquel que quiere reivindicar en Madrid lo que es justo para esta tierra.
¿Qué significa para usted la verde y blanca?
–Pega un pellizco. Es el símbolo que más identifica al pueblo andaluz. Nos une y nos hace más fuertes.
¿Cuál es, para usted, la historia de Andalucía?
–Tiene miles de años. La historia más moderna está vinculada a Al-Andalus, a la época romana... El andalucismo irrumpe con Blas Infante. Hubo un nuevo modelo andalucista, después de la transición, que surgió desde la clandestinidad y que después se fraguó con el PSA.
Es el 28F una jornada de reivindicación...
–Aquel 28F fue una jornada de reivindicación en las urnas que permitió traducir lo que se produjo en la calle el 4D. No me equivoco al decir que Andalucía contó con el referéndum más leonino de toda la etapa democrática. Se hizo con mala intención para que no saliera y los andaluces demostramos con creces nuestra voluntad. Lamento la pregunta indescifrable del referéndum y las posiciones iniciales de la UCD y del PSOE. No hay que olvidar que la posición inicial del PSOE era la del ‘no’. El 28F fue un día histórico para Andalucía y la democracia española. Había que ganar por mayoría absoluta del censo de votantes en todas las provincias. Fue una encerrona pero el pueblo andaluz consiguió liberarse. El 28F consiguió que nuestras reivindicaciones llegaran al Congreso de los Diputados y se pudiera lograr la autonomía por la vía del 151.
¿Qué pasó después?
–El PSOE andaluz ha conseguido adormecer a este pueblo. Hay que volver a ese carácter reivindicativo que nos hizo fuertes. Este pueblo está callado y adormecido. Tiene que volver a gritar y pedir lo que le corresponde.
¿Cree que Juanma Moreno es andalucista?
–De boquilla coge la bandera de Andalucía y se la envuelve. Aquí lo que pasa es que todos los partidos centralistas han tenido en Andalucía su caladero de votos. Los partidos centralistas no tienen base de andalucismo. Lo que hay es una banalización de la bandera y del nombre de Andalucía.
¿Qué opina de que Vox no reivindique la figura de Blas Infante?
–Lo mismo que en un despacho del Parlamento haya banderas de la Falange o pegatinas del acrónimo de CAFE, que fue la frase con la que mataron a García Lorca. El padre de la patria andaluza es Blas Infante y así lo votó casi por unanimidad el Parlamento. Es un elemento que no nos van a quitar de la identidad andaluza. Del Parlamento hay que desterrar ciertos discursos y banderas que han generado confrontación y miles de muertos, muchos de ellos en cunetas.
¿Qué proyecto político quiere para Andalucía?
–Un proyecto político que genere poder en Andalucía. Basta ya que desde Madrid se juegue con nuestras miserias. Un ejemplo muy claro de esto es la Base Militar en Córdoba, provocando una pelea con Jaén. La decisión de la Colce viene por la lucha interna en el PSOE, una decisión tomada para que haya animadversión con Susana Díaz. Es una estrategia más del PSOE para utilizar a los andaluces. También es increíble que muchas grandes empresas españoles trabajen en Andalucía y tributen en Madrid. Andalucía es la tierra más rica y que más economía genera. Es una falsedad permanente que se diga lo contrario.
¿Quién está detrás de usted en AxSí?
–Andalucía Por Sí tiene unos mil militantes. Somos 24 personas ahora mismo al frente de la coordinadora nacional. AxSí es una fuerza nueva que pretende ser el referente político andaluz. Queremos defender a Andalucía desde Andalucía.
¿Cree que hay provincias de primera y otras de segunda en Andalucía?
–No lo creo. Uno de los grandes problemas de Andalucía es su escasa vertebración. Está poco cohesionada y deberíamos pensar en otra estructura. Defendemos la comarcalización andaluza porque es la forma más real para afrontar los problemas de los andaluces. Las provincias son ficticias.
¿Apuesta por acabar con las provincias?
–Planteamos suprimir las provincias y abogar por otro sistema. La comarcalización de Andalucía sería un paso importante que podría acercar la política al ciudadano. En Cataluña, por ejemplo, el sistema de comarcas funciona.
¿Qué le diría al votante que no se siente identificado con ningún partido?
–Que nos conozca. Andalucía necesita tener poder de verdad. Cuando ha sido así nos fue bien. Hay que volver a retomar la senda del poder en el Congreso de los Diputados, en el Parlamento Europeo y, por supuesto, en el Parlamento de Andalucía.
¿Por qué en otros territorios se meten con nuestro acento?
–Porque no nos conocen. Los partidos centralistas han generado una imagen distorsionada de Andalucía. Interesa vender que somos indolentes y que hablamos mal porque somos unos catetos. A los clichés hay que responderlos con iniciativa y no devolviendo el puñetazo. Somos la tierra con más jornaleros de España, muchos de ellos en el campo con la soleta. Si fuéramos vagos no se comerían nuestras producciones. Los andaluces hablamos muy bien y tenemos cientos de hablas. Aquí nos entendemos todos y el problema es de Despeñaperros hacia arriba, que escuchan muy lentos.
