La Alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, acompañada de los tenientes de alcaldesa responsable de la empresa municipal de aparcamientos, Emasa, y de Urbanismo, José Blas Fernández e Ignacio Romaní, respectivamente, inspeccionó hoy el resultado de los trabajos de remodelación que el Ayuntamiento ha realizado en la superficie de la plaza Ingeniero La Cierva, que en la mañana ha quedado abierta al público.
Las obras efectuadas por el Ayuntamiento son consecuencia de un pleito que mantenía hace años con la empresa Ferrovial-Agromán, obligada por sentencia a reparar las filtraciones de agua del aparcamiento situado en el subterráneo de la plaza. A colación de las obras de impermeabilización que tenía que hacer la citada empresa, el Consistorio decidió realizar un proyecto para mejorar la plaza en superficie, que ha supuesto una inversión municipal de 636.000 euros y, entre otras cosas, la eliminación de los desniveles que impedían la accesibilidad de la plaza para todas las personas.
La alcaldesa ha subrayado que estas mejoras en la superficie de la plaza, además de crear empleo en tiempos de crisis, “han permitido transformarla en un espacio público más accesible, acogedor, con más zona verde y abierto a nuevos usos gracias a la reordenación de las pérgolas y los demás elementos de la plaza”. Ha adelantado que está previsto ampliar el número de juegos infantiles en la plaza, dotarla de un kiosco para venta de periódicos y realizar alguna actividad cultural que antes era inviable por la configuración que tenía.
La plaza tiene una superficie de 4.600 metros cuadrados y, tras la remodelación, ofrece nuevas posibilidades porque se ha actuado en varios frentes. Por un lado, se han eliminado las barreras arquitectónicas al suprimirse los escalones interiores y los desniveles. Se ha triplicado la superficie de zona verde presentando, se ha recuperado las zonas de sombra con la restauración de las pérgolas y se ha renovado el mobiliario urbano con nuevas papeleras, farolas y 30 bancos de madera, confortables, en sustitución de los antiguos de piedra.
La remodelación efectuada recoge en criterios técnicos las demandas de la asociación de vecinos de la zona, con quienes el Ayuntamiento ha mantenido varias reuniones a fin de recabar sus peticiones y necesidades para la nueva plaza. El mismo cauce de contacto se ha mantenido con la asociación Agadi, que planteó la necesidad de suprimir los antiguos escalones de la plaza para hacerla más accesible y el Ayuntamiento accedió incorporándolo como una prioridad del proyecto, que transformó para llevarla a cabo.
En cuanto a las zonas verdes, se ha triplicado la superficie verde de la plaza. Se han plantado 10 olivos centenarios, 800 tradescantias, 22 palmeras tropicales, 400 geranios rojos, 16 olivos con forma de bonsai y 600 lavandas. Todas las especies plantadas soportan fuertes vientos, un alto grado de salinidad y no necesitan mucho agua, algo importante al estar encima de un aparcamiento subterráneo. Asimismo, se ha ajardinado la práctica totalidad del perímetro de la plaza, que ahora cuenta con 550 m2 de jardineras.
La zona de pérgolas se concentra en la zona central, que hace de punto de conexión entre las actividades que ahora acoge la plaza y otras nuevas que se plantean desde el Consistorio como pequeños conciertos o pequeños espectáculos de títeres. Se han recuperado las pérgolas que estaban instaladas con anterioridad y se han colocado en paralelo, conectadas entre sí, para garantizar la sombra. El conjunto cubre una superficie de 240 m2 en una zona donde se situarán tres hileras de bancos de doble orientación.
Con respecto a las filtraciones de aguas al parking subterráneo, la empresa Ferrovial-Agromán ha realizado la obra de reparación de las mismas en cumplimiento de una sentencia judicial que le obligó a ello tras un pleito que ganó el Ayuntamiento. Dichos trabajos han tenido un coste de unos 450.000 euros y han consistido en la impermeabilización del parking, a través de la cubierta de la plaza.