Hace unos días se presentaba en Cádiz el borrador del Plan Municipal contra la Violencia de Género. En ese momento salía a la luz pública el hecho de que la concejala de la Mujer se ausentara de la reunión con los técnicos; las críticas de la oposición a que se trataba de una mera declaración de intenciones y el comunicado que se remitía a algunos medios por parte de uno de los colectivos (que incluía sin permiso la firma de muchos otros) donde se quejaban por el trato dado por la oposición al personal técnico. Mucha connotación política pero muy poca realidad, como piensan algunos de los colectivos participantes en esa reunión. La esperanza está en que esos grupos de trabajo que se van a poner en marcha saquen adelante un documento completo y real.
El borrador está formado por poco más de medio centenar de páginas que van desde la fundamentación, pasando por el análisis de la realidad, siguiendo por la normativa, los principios, las áreas estratégicas (que van desde la coordinación institucional hasta la formación, pasando por la detección y atención integral). Se trata de un boceto de lo que se supone que debe ser esa guía a seguir, máxime teniendo en cuenta que en 2016 desde el Ayuntamiento se atendía a 171 mujeres por violencia de género, de las que 106 acudían por primera vez. En total se desarrollaban 528 actuaciones. La mayoría de las usuarias atendidas tienen entre 31 y 40 años, de las que más de la mitad eran madres.
Visto el perfil y la cantidad de usuarias la actuación se hace más que necesaria. Y aunque en el texto recuerda que en el pleno de septiembre de 2015 se acordaba “asignar una dotación presupuestaria suficiente para poder luchar contra la violencia de género para poder llevar a cabo política de igualdad activas, integrales, participativas y pedagógicas , no hay ninguna cifra que cuantifique el plan. Solo la cuantía que se considere suficiente para garantizar el plan. Y eso y nada es lo mismo”, afirma la concejala del PSOE, María José Rodríguez.
El borrador del plan indica que ha existido una fase de estudio y de diagnóstico, que desde el PSOE califican como “ridícula, puesto que no llega ni a un folio y según los datos de la Fundación Municipal de la Mujer (FMM), eso no es ‘integral’”.
En relación a las novedades que ofrece dicho borrador “apenas si se aprecian, sólo recoger los testimonios de las víctimas que hayan superado esta situación y que sirva de estímulo”. A juicio de la edil socialista, “el borrador es reiterativo, reincidente con lo que hay, muy programático pero sin actividades y con poco o nada de intervención”. En este aspecto coincide María Fernández-Trujillo, de Ciudadanos, quien echa en falta “medidas concretas para la ciudad de Cádiz. Recoge lo mismo que se ha venido haciendo hasta ahora y así no se puede luchar contra la violencia de género”.
Según la concejala no se percibe “el trabajo y la firma del nuevo equipo de Gobierno”. A su juicio, debería haberse realizado un “trabajo inicial de base concreto porque han tenido dos años para desarrollarlo”.
Para el Partido Popular se trata de un plan que no tiene acciones, que no está calendarizado, y que no contempla un presupuesto. “Es cualquier cosa menos un plan”, afirma Mercedes Colombo y la evidencia de que el documento no era válido ni siquiera como punto de partida llevó la reunión a una fase de debate en la que se estableció el método de trabajo para la redacción de un verdadero plan integral contra la violencia de género en Cádiz. Finalmente se estableció una dinámica de trabajo que comenzará ahora con los grupos de trabajo.
Según Rodríguez, el documento está falto de contenido, puesto que “no hay actividades específicas, no hay plazos de consecución, no hay evaluación ni presupuesto, a la vez que deja fuera a hombres –fundamentales en materia de prevención y sensibilización- y menores ”.
En estas “lagunas” coincide Fernández-Trujillo. Para la concejala de C’s, “es fundamental tener a los hombres presentes en materia de prevención, si queremos lograr un cambio”. Este trabajo evidencia “la falta de gerente en la Fundación”.