Así lo aseguró la portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, en declaraciones en la Cadena Ser, recogidas por Efe, al ser preguntada por la iniciativa que su partido planteará como alternativa a la ley del aborto, una proposición de ley “de protección de la maternidad y ayuda a la mujer”.
El sábado, el presidente del PP, Mariano Rajoy, adelantó esta propuesta en un coloquio con jóvenes durante la convención nacional de este partido, en respuesta a una joven de 25 años embarazada que se interesó por las alternativas que darán los populares a las mujeres que no quieren abortar pero que tienen pocos recursos económicos.
Sáenz de Santamaría señaló que el PP está estudiando la posibilidad de adoptar un niño antes de que nazca para dar diferentes salidas “tanto a las mujeres que quieren tener a sus hijos como a las que consideran que no pueden hacerse cargo de ellos, pero que quieran buscar una buena familia para ellos”.
“Queremos que las mujeres que quieran tener un hijo y tengan muchas dificultades tengan la garantía de ver unas instituciones del Estado que les van a ayudar y apoyar, y que puedan tomar la decisión que mejor crean y también para sus hijos”, apostilló.
El obispo de Palencia, José Ignacio Munilla, aseguró que quien apruebe la Ley del Aborto “estará en situación de complicidad de asesinato”.
El obispo de Palencia, que lleva tres años en el cargo y cuyo nombre es uno de los que suenan para ocupar el obispado de San Sebastián, explicó en una entrevista que ayer publica Diario Palentino que “los cooperantes de este tipo de actos tendrán responsabilidad moral ante Dios”.
Manifestó respecto a la posibilidad de que se le niegue la Comunión a los políticos que apoyen la Ley del Aborto, que las declaraciones realizadas desde la Conferencia Episcopal “están de acuerdo con la doctrina de la Iglesia y en el camino que se considera más adecuado”.
Sobre la posibilidad de que tenga que incorporarse a la Diócesis de San Sebastián, Munilla asegura que, si se produce una llamada, “la atenderá encantado” y, de lo contrario, “continuará con su labor al frente de la Diócesis de Palencia cumpliendo la voluntad de Dios”.
