El capitán del Puerto de Gibraltar, John Ghio, ha recibido de los contratistas un calendario actualizado y una metodología revisada sobre los preparativos y planes para la retirada final de los restos del pecio del granelero 'OS 35', según informa el Gobierno de Gibraltar.
El proceso de retirada del pecio será metódico y pausado e implicará varias operaciones complejas.
En primer lugar, se garantizará la estanqueidad tanto de la proa como la popa. Los contratistas han comunicado que estos trabajos preparatorios están llevando más tiempo del previsto y que es poco probable que el pecio quede totalmente retirado antes de la fecha límite del 30 de mayo.
A continuación, se sacará a flote la sección de popa restableciendo la flotabilidad. La fecha provisional para esta operación es el 29 de mayo. Los contratistas esperan estar en condiciones de iniciar la operación de izado de la sección delantera mediante barcazas el 2 de junio.
La retirada total del pecio está prevista para el 16 de junio. Aunque esta breve ampliación del plazo resulte inoportuna, es vital que estos procesos se desarrollen correctamente para garantizar que el pecio se iza de forma segura y con el mínimo impacto ambiental.
Ya se han instalado puntos de elevación en el casco de la sección delantera; las herramientas de elevación a bordo de las barcazas están listas para su uso. Actualmente, se están realizando exhaustivos trabajos preparatorios para hacer estancos todos los compartimentos de la sección de proa.
Para ello, se necesita un equipo de buzos experimentados, que trabajan al máximo de su capacidad para sellar y probar los compartimentos. Los compartimentos estancos ayudarán a aligerar la carga que hay que levantar. En cuanto se confirme que la sección delantera es estanca, los buzos procederán a sellar todos los compartimentos de la sección de popa.
Operaciones de elevación
Primero, la sección de popa se reflotará restableciendo la flotabilidad, en un proceso inverso al utilizado para bajarla al lecho marino.
A continuación, vendrá la sección delantera, que se alzará del fondo del mar utilizando los puntos de izado.
Una vez despejado el fondo marino, se pasarán cadenas adicionales por debajo del casco para reforzar la estabilidad y dotar de mayor control al proceso de izado. Cada sección se colocará junto a la barcaza semisumergible antes de sacarla del agua.
Estas fases de la operación son las que conllevan el mayor riesgo de vertido de residuos de petróleo que, en cantidad desconocida, aún siguen atrapados en el casco y podrían filtrarse durante los trabajos de reflotamiento e izado.
Planes detallados de respuesta ante vertidos de petróleo
La Autoridad Portuaria de Gibraltar (Gibraltar Port Authority, GPA) está colaborando estrechamente con [el contratista] Koole y el Departamento de Medio Ambiente para ultimar planes tácticos de respuesta detallados ante la eventualidad de un vertido de petróleo durante las operaciones de reflotamiento y elevación, con el fin de minimizar en la medida de lo posible el impacto ante el comienzo de la temporada de baño.
Para ello, se colocarán barreras de contención alrededor de cada una de las secciones del pecio, de forma que cualquier fuga de residuos pueda ser eliminada lo antes posible. Puesto que esto no garantiza una contención absoluta, se han puesto también en marcha planes de contingencia detallados para mitigar el impacto en el medio ambiente, incluido el posible despliegue de barreras preventivas en Catalan Bay y Sandy Bay, así como de una barrera de desvío en Eastside.
La Autoridad Portuaria de Gibraltar ha garantizado que los contratistas dispondrán in situ de suficientes medios de respuesta para hacer frente a cualquier posible vertido de petróleo y la GPA se limitará a proporcionar capacidad de reserva. De este modo, no se prevé el cierre del Puerto de Gibraltar en caso de vertido de petróleo. No obstante, existen planes de contingencia para reducir la actividad portuaria en caso necesario.
El Departamento de Medio Ambiente reforzará las patrullas tanto en tierra como en el mar durante las operaciones de reflotamiento y elevación, con un plan de respuesta rápida activo ante cualquier posible vertido de petróleo.
A buen ritmo
El capitán del Puerto, John Ghio, señala que "los trabajos de retirada del OS 35 avanzan a buen ritmo, pero la realidad del estado del pecio impone el ritmo de las operaciones. Es vital que cada etapa se complete de forma cuidadosa, pausada y segura".
"Aunque cabe subrayar un breve retraso para su retirada definitiva, esta es la única forma segura de hacerlo para mitigar un eventual foco de contaminación y minimizar el impacto sobre el medio ambiente y el litoral de Gibraltar", explica.
"Me gustaría aprovechar la oportunidad para agradecer a la ciudadanía su paciencia a lo largo de un proceso tan extremadamente complejo y delicado”, concluye.