A las siete y media de la mañana Julián Villasante, propietario del centro de lavado y gasolinera de Torreguadiaro, junto a Sotogrande, entró como cada mañana en su negocio. Se dirigió a la tienda, desactivó la alarma y comenzó su rutina como cualquier otro día.
Lo que menos podía imaginar fue lo que se encontró cuando se disponía a controlar los marcadores de la gasolinera. "El aceptador de billetes estaba en el suelo, la caja donde está empotrada la caja fuerte estaba abierta y todo era un desastre, con la caja reventada".
La alarma estaba conectada, pero "han debido entrar por un sitio donde no había perimetrales, porque no ha saltado", explica. Se han llevado, nada y más y nada menos, que 5.400 euros, además del daño material que han ocasionado. "Más o menos he estimado que serán unos 60.000 euros", afirma Villasante. Y es que han quedado inservibles el "aceptador de billetes, el sistema electrónico, el sistema bancario, la propia caja fuerte, la obra civil para encajar la caja de seguridad, la puerta de acceso...".
El recinto tiene cámaras, pero el o los asaltantes, "sabían muy bien lo que hacían", ya que entraron por una zona que no estaba cubierta por cámaras de seguridad. Giraron la que enfocaba a la caja fuerte alrededor de la 1.55 hora de la madrugada y con una radial la reventaron. "Es extraño que nadie oyera nada, porque el ruido que debieron hacer debió ser mortal, para romper el acero y el hormigón".
El propietario del negocio ha presentado una denuncia esta mañana ante la Guardia Civil, cuyos agentes han estado tomando huellas. Ahora, toca investigar.
