El portugués Ricardo Costa hirió de gravedad en el tiempo de descuento al Deportivo (2-3), que se había apoyado en el acierto de Iván Sánchez 'Riki' y en las intervenciones de Dani Aranzubia para tratar de salvar un empate que se le escapó en la orilla.
El Valencia, que se adelantó en el marcador en el primer minuto, desperdició varias ocasiones claras, logró la igualada cuando el equipo coruñés se había quedado con diez por expulsión del portugués Sílvio a 38 minutos para el final, y se impuso en los instantes finales al colista, que acabó con nueve.
El conjunto valenciano madrugó en Riazor, fabricó un córner cuando el Deportivo ni siquiera estaba en el partido, lo cabeceó Jonas en el primer palo, donde Sílvio apenas le estorbó, y cogió por sorpresa a Dani Aranzubia, que también estaba dormido. Habían transcurrido 32 segundos.
El gol refrescó, en la memoria del deportivismo, que no dejó de animar a su equipo, el partido del descenso a la Liga Adelante en la última jornada de la temporada 2010-11, también con un gol tempranero del Valencia, entonces de Aduriz.
La defensa del Deportivo, desastrosa, habilitó todos los ataques que propuso el Valencia, que perdonó el segundo en dos ocasiones antes de los diez minutos de partido, primero en un saque de esquina que Aranzubia fue incapaz de despejar y que el paraguayo Valdez remató por arriba de la portería porque el balón tocó en un rival, y más tarde en un mano a mano que falló el argentino Piatti.
El Valencia estaba fresco a pesar que repitió prácticamente el mismo once del partido de Copa ante el Real Madrid (Diego Alves, Banega y Piatti fueron las novedades) y el Deportivo no dio sensación de poder reaccionar hasta que Pizzi probó a Alves con un disparo ajustado al poste derecho.
El equipo coruñés rozó el empate a balón parado con un remate de espuela de Riki que no aprovechó en el segundo palo Aythami, y el Valencia tuvo clemencia dos veces más: ante un nuevo desajuste defensivo que dejó a Valdez solo ante Aranzubia y en otra aparición del delantero que cabeceó un centro de Piatti y se encontró con una respuesta espectacular del portero.
El Valencia podía haber sentenciado al Deportivo, pero no lo hizo, y el equipo de Domingos Paciencia resucitó pasada la media hora de partido en otra acción a balón parado, una falta lejana que ejecutó Pizzi y que Riki remató de cabeza a la escuadra de la portería de Diego Alves.
Los levantinos mantuvieron el control del balón, pero no le sacaron rentabilidad, y, además, dieron por finalizada la primera parte antes de tiempo, cuando el Deportivo, que había llegado tarde al inicio del partido, marcó el segundo, otra vez con el olfato de Riki, congestionado hace dos años ante el Valencia y que se sacó la espina de aquella noche fatídica de 2011.
Ernesto Valverde refrescó a su equipo con la entrada de Jonathan Viera, que lo intentó con un disparo con el interior que puso en apuros a Aranzubia, y pronto se encontró con un panorama favorable: Sílvio recibió la segunda amarilla y se fue al vestuario a 38 minutos del final.
El técnico del Valencia lo vio claro, incorporó a Bernat y el centrocampista fue una pesadilla para Manuel Pablo, al que dio un par de avisos antes de servir una asistencia a Valdez para que el paraguayo igualara el partido.
El Deportivo, con un centrocampista como lateral (Jesús Vázquez) se atrincheró en su campo y, gracias a Aranzubia, que despejó con la pierna un remate a bocajarro de Valdez, mantuvo el empate hasta que en el tiempo de descuento Ricardo Costa le dejó sin botín y hundido, con 16 puntos en 21 partidos.