A pesar de jugar su partido 800 sobre pista dura, de ganar el 308 del Grand Slam, el suizo Roger Federer reconoció tras vencer al austríaco Jurgen Melzer en la primera ronda del Abierto de Australia, que él también sintió nervios.
"Hubo nervios allí", dijo el de Basilea al analizar los primeros compases del encuentro contra Melzer. "Creo que mi saque estuvo y se fue al principio, lo que me sorprendió un poco porque en la Copa Hopman funcionó bastante bien. Creo que tuve nervios ahí, me sentí nervioso nada más comenzar el encuentro", reiteró.
Federer comentó que incluso si su partido se hubiera disputado durante el día, con calor, no hubiera sido inconveniente. "Nigún problema para mi, estoy preparado, en forma. Creo en mi forma física. Eso no hubiera sido ningún inconveniente para mi"
"Estaba muy pero que muy feliz tras ganar, y estar ahí fuera disfrutando. Jugar contra Jurgen fue guay. Nos conocemos desde que teníamos 16 años, incluso jugamos dobles juntos en la Orange Bowl en Flamingo Park en Miami, tenemos que volver", señaló.
"Casi nada", respondió sobre el estadounidense Noah Rubin su próximo rival, natural de Long Island que hoy ganó su primer partido en un Grand Slam.