Ya hay fecha para el Paseo Fluvial. Así nos lo han comunicado los trabajadores de las bolsas de aparcamientos de ECS, que con el comienzo de las obras ven peligrar sus puestos de trabajo; nueve en total. Un proyecto con el que la ciudad empezará a mirar al río Guadalete, borrando de un plumazo -en medio de una profunda crisis climática- un elemento que hasta ahora había enturbiado el paisaje: los coches. Pero que, al parecer, también acentuará un problema que lleva arrastrando años el casco histórico; la escasez de aparcamiento. El lunes, 7 de noviembre, Impulsa llevará a cabo los trabajos, que acabarán con los espacios de Calderón (ubicado en la Cristalera) y Bajamar 1 (frente a MRW). En total, se eliminarán a priori 360 plazas de aparcamiento (de pago) en el centro.
La hostelería en contra
A pesar de que la promesa del Ayuntamiento es emplazar las bolsas que se perderán en otras ubicaciones, lo más cercanas posibles, la situación preocupa bastante a los vecinos y comerciantes de la zona.
"Al cliente le gusta venir en coche. La eliminación de estos aparcamientos va a ser nefasta para los negocios de Bajamar, un auténtico puntillazo. Que primero hagan plazas subterráneas y después todos los paseos fluviales que quieran. Hay que hacer más plazas, no eliminarlas, para que los negocios prosperen, debe haber aparcamiento. El centro está moribundo, no hay alquileres ni público de por sí y, ahora, con estas obras habrá aún menos. Si no hay peatones... Explícame, ¿para quién es el Paseo Fluvial? Como esto siga así vamos a tener que cerrar los negocios. Las propiedades locales podrán permitírselo pero los alquileres desde luego que no. Por no hablar de la incomodidad de las obras que va a impedir la circulación...", se queja Carlos Anelo de la Sala Milwaukee; uno de los negocios que se verían afectados.
"Va a suponer un año entero con cortes de tráfico. No tenemos información, nadie se ha puesto en contacto con nosotros. La Dorada vive de su terraza, tenemos un salón muy pequeño, ¿qué va a pasar con ella? Vamos a pasar unos meses muy complicados. Ya es complicado aparcar en Bajamar con los aparcamientos, imagina si solo queda uno abierto para todos los vecinos. El cliente se aburrirá e irá a otro sitio. Más que la Navidad - y los clientes que perderemos que vayan a comer y cenar tras las zambombas - nos preocupa la temporada de primavera-verano que es la que nos salva. Para entonces, ¿ya no quedará polverío? A la larga el Paseo Fluvial será positivo; siempre que no nos quiten aparcamiento, quede bonito y consiga atraer al público", añade el encargado de La Dorada, José Manuel Márquez.
"No lo veíamos llegar. Me va a hacer una auténtica Pascua. Claro que nos perjudica, sobre todo a la terraza. No sé si podremos tenerla operativa. Y el ruido que conlleva una obra así... En un futuro será favorable, pero ahora mismo no. No me hace ninguna gracia", espetaba Mabel; la dueña de restaurante Bespoke.
Aunque, según ha podido conocer este medio, las plazas no se perderían de golpe. El planteamiento tanto del Ayuntamiento como de Impulsa sería no cerrar los dos a la vez y emplazar dichas plazas a otras bolsas cercanas. Una de ellas, estaría ya asegurada. La otra pendiente de confirmación.
"Nos han comunicado que la intención es que dejemos un aparcamiento y podamos estar en otro al día siguiente. De momento, según Impulsa, hay un aparcamiento seguro. Faltaría uno más para no prescindir de nadie. Si no se encuentra emplazamiento, la empresa ya nos ha comunicado que no quedaría más remedio que despedir a la mitad del personal. Una situación que nos tiene muy preocupados. Se pueden ir a la calle gente que lleva ocho años en la empresa, como está la cosa y la edad que algunos tenemos. No saber qué va a pasar, es una autética pesadilla. Ni siquiera he querido saber quién se quedaría y quién no. Es impensable que se salve solo media plantilla. Vamos a pelear hasta el último minuto, haremos lo que tengamos que hacer. En princicipio, el día 6 de noviembre se cerraría solo uno de los dos parkings -confiando en que se cumpla la palabra de que se cierre y empiecen de inmediato las obras-. Es una forma de ganar tiempo, ya que existe muy poco margen de maniobra”, explicaba el enlace sindical de ECS José Luis Zampaña Quintero. Aunque no es seguro, todo apunta a que sería el de menos plazas, es decir el de Cristalera (con 130), con la intención de perjudicar lo menos posible a los comerciantes, clientes y vecinos abonados.
Desde el Ayuntamiento afirman que "llevamos trabajando semanas en alternativas para que comerciantes, clientes y vecinos no se vean perjudicados y recuperen sus plazas en otras ubicaciones, a poder ser lo más próximas posibles". Alternativas que se conocerán en breve.
La Navidad, en medio
Las obras, con una ejecución de 48 semanas, se solaparían con la Navidad. Una fiesta en la que el casco histórico vuelve a cobrar vida, contando con una gran afluencia de público. "Me parece raro que con la Navidad encima, empiecen ahora las obras y eliminen aparcamientos del centro. ¿No es más normal que esperen a enero?", se preguntaba Zampaña.
Un paseo libre de contaminación y que recupera historia de El Puerto
Tras la firma del contrato, que se efectuó el pasado viernes, se da luz verde a la ejecución del Paseo Fluvial. Una apuesta con un claro objetivo: reducir las emisiones de dioxido de carbono. Para ello, se peatonalizará la margen derecha del río. Por donde pasean ahora los coches, pasearán en un futuro las personas y los animales. La idea es convertir el espacio en un punto de atracción social, que potencie el desarrollo de las actividades turísticas, deportivas y de ocio que fomente la sostenibilidad donde respirar aire limpio.
Enmarcado dentro de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado, el Paseo Fluvial será cofinanciado mediante el programa operativo FEDER de crecimiento sostenible 2014-2020 (EDUSI), mejorando el aprovechamiento de las zonas verdes, las dotaciones y en general los recursos naturales del río.
Con 1.705 metros, recorrerá la margen derecha del río creando un paseo que comprenderá hasta diez ámbitos de actuación diferentes, tematizado en diferentes aspectos de la historia de la ciudad, para una superficie total de unos 16.500 metros cuadrados; poniendo en valor esta zona de la ciudad que pasa a formar parte del casco urbano convirtiendo al río en el nuevo eje urbano, turístico, cultural, social, familiar y comercial de la ciudad.
Mayor actividad
El Paseo potenciará los espacios ribereños como espacios de disfrute, tanto para la población del municipio como para sus visitantes. De esta forma se logra la integración del río en la trama urbana de la ciudad rompiendo su tradicional barrera, construyendo un Puerto que mira a su río, poniéndolo en valor y convirtiéndolo en un eje vital de El Puerto, igual que muchas ciudades europeas y grandes capitales de España.
