El Consejo Vecinal de la FLAVE celebrado el pasado lunes 14, se mostró preocupado por el acuerdo de la Unión Europea con Turquía para “gestionar la crisis de los refugiados”
La Federación Vecinal recuerda que “para nadie es un secreto que las personas con necesidades básicas se juegan la vida para llegar a los países en donde se garantiza un estado de bienestar y que dependiendo de las necesidades de mano de obra en cada época se ha facilitado la llegada de personas “mano de obra barata” porque convenía, con la excusa de la Crisis se cerraron las puertas y se endurecieron las políticas para evitar la entrada por la vía legal, lo que ha conllevado a un desbordamiento masivo de personas para entrar ilegalmente como sea, con el objetivo de asegurar la supervivencia propia y de sus familias”.
Entiende que “las guerras de Oriente Medio y el África subsahariana han puesto en jaque la emergencia de la inmigración al sumarse los refugiados que huyen para salvar la vida. La UE ha dado finalmente luz verde a una propuesta macabra para aplicar el mecanismo de expulsión en caliente de los inmigrantes ilegales con la excusa de que Turquía los acoge por una suma de dinero bastante considerable (6.000 millones de euros en dos años) y a partir de ahora por cada sirio que Turquía readmita, otro sirio será reasentado desde Turquía hacia la UE”.
Desde la FLAVE “consideramos que este es un mecanismo que vulnera los derechos humanos y que es una solución perversa para controlar aún más a las personas como moneda de cambio y para que cuando finalice el periodo de acuerdo con Turquía ya se haya establecido como norma la expulsión en caliente que finalmente parece que es el objetivo de la hipócrita Europa que renuncia a sí misma y sus valores con un absurdo camino de supervivencia”.
