En una grabación de audio emitida por la cadena de televisión qatarí Al Yazira, Bin Laden advirtió de que el día que EEUU tome la decisión de ejecutar a Jaled Shaij Mohamed, supuesto cerebro de esos atentados, Al Qaeda matará a todos los estadounidenses que caigan en su poder.
“La Casa Blanca ha expresado su deseo de ejecutarlo –señaló Bin Laden–. El día que EEUU tome esa decisión habrá adoptado la decisión de ejecutar a todos los de vosotros que capturemos”.
No se conoce que actualmente exista algún rehén de nacionalidad estadounidense en manos del grupo liderado por Bin Laden o de alguna de las organizaciones terroristas vinculadas a Al Qaeda, aunque sí hay cautivos de varias nacionalidades europeas.
El líder de Al Qaeda se quejó, además, de que el presidente EEUU, Barack Obama, sigue los pasos de su antecesor, George W. Bush, “en muchos asuntos importantes, como la escalada de la situación en Afganistán” y en el trato a los presos del grupo terrorista, en cuya cabeza situó al “héroe muyahidín” (guerrero santo) Shaij Mohamed.
“Los responsables de la Casa Blanca aún practican la injusticia contra nosotros, especialmente con el respaldo a Israel en Palestina”, subrayó Bin Laden, en paradero desconocido.
Asimismo, el cabecilla terrorista recordó que, aunque los estadounidenses creen que están en un lugar seguro al tener un océano de por medio, sufrieron un ataque “fuerte y estruendoso” en su propio país el 11 de septiembre del 2001.
Esta es la primera grabación que se conoce de Bin Laden desde el mensaje que difundió el pasado 29 de enero, también emitido por Al Yazira y en el que criticó a los países industrializados por su responsabilidad por el cambio climático.
El comentarista de la cadena Al Yazira Abdel Bari Atwan afirmó que el comunicado de Bin Laden puede representar un anticipo de que Al Qaeda está planeando alguna operación para secuestrar estadounidenses.
El pasado 11 de febrero, el Pentágono presentó los cargos y pidió la pena de muerte para Shaij Mohamed y otros cinco supuestos miembros de Al Qaeda por los atentados del 11-S, en los que murieron casi 3.000 personas.
El paquistaní Shaij Mohamed es el principal acusado en ese caso y confesó haber planeado cada detalle del 11-S, aunque lo hizo tras ser sometido a la técnica de interrogatorio de “asfixia simulada”, por lo que su confesión como prueba en el juicio podría ser problemática por el método aplicado para conseguirla.
Shaij Mohamed fue detenido en el 2003 por el Ejército paquistaní y llevado en el 2006 al centro de detención estadounidense de Guantánamo (Cuba), donde iba a ser procesado ante un tribunal militar.
Sin embargo, en noviembre pasado el secretario de Justicia de EEUU, Eric Holder, anunció que Shaij Mohamed y algunos de sus presuntos cómplices serían juzgados en tribunales civiles en territorio de EEUU.
La decisión de juzgar al presunto cerebro de los atentados del 2001 ante una corte civil levantó protestas de los sectores conservadores estadounidenses.
El pasado 19 de marzo, el diario de EEUU The Wall Street Journal informaba de que se estaba negociando un acuerdo para que Shaij Mohamed fuera procesado ante lo que denominaba como “comisiones militares reestructuradas.