"Anoche hablamos por teléfono con la familia y les informamos de que había muerto", ha explicado Vinuesa en declaraciones a Europa Press. Vinuesa ha explicado además que la familia está estudiando emprender acciones legales por la muerte del niño.
El menor se encontraba acompañado de un monitor de esquí en la pista 4 de la estación, a unos 2.900 metros de altura, cuando les sorprendió una avalancha de unas dimensiones de 100 por 300 metros.
El monitor fue hallado tras unos minutos por el propio personal de seguridad de la estación, pero el menor no fue localizado hasta 45 minutos después, según informó la Policía de la región en un comunicado, debido especialmente a la imposibilidad de emplear helicópteros ante la mala situación meteorológica.
En cuanto fue localizado, el niño fue trasladado en ambulancia al hospital de Viège y, posteriormente y ya en estado crítico, en helicóptero hasta Lausana. Según la Policía del cantón de Valais, la avalancha ocurrió sin aviso alguno, aunque Meteorisk, la agencia suiza encargada de las alertas de avalancha, sí había emitido una alerta debido al fuerte viento en la zona.
