“Estamos condenados a estar juntos, maravillosamente condenados”, afirmó Chávez, tras el acto de firma de los documentos, al término de la reunión en el palacio presidencial de Miraflores, en Caracas.
“Hemos constatado el avance y el dinamismo nuevo que le hemos dado a nuestra relación”, dijo el presidente venezolano, antes de agregar que no van a permitir que esas relaciones se vean “perturbadas” por ningún evento o circunstancia.
Uribe y Chávez, que hace un año estaban enfrascados en una grave crisis diplomática derivada del conflicto de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), se mostraron en todo momento dispuestos al diálogo.