El que fuera director del Instituto de Medicina Legal en el momento del accidente de metro del 3 de julio de 2006, Matías Vicente, ha destacado que, tras el siniestro, pasaron por las instalaciones del centro varios dirigentes políticos, pero ha indicado que no recibió "ninguna indicación" de ellos.
Vicente, que ha comparecido este lunes en la comisión de las Cortes Valencianas que investiga el accidente de Metrovalencia en el que fallecieron 43 personas y otras 47 resultaron heridas, ha explicado tras el accidente acudieron al Instituto de Medicina Legal responsables políticos como los entonces presidente de la Generalitat, Francisco Camps o la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.
Según Matías Vicente, no habló "nunca" con el conseller de su área, ya que con quien trabajaba era con la Dirección General, que era "el conducto reglamentario".
Preguntado por los diputados por si cree que influyó en la gestión del accidente del metro la visita del Papa a Valencia que fue cinco días después del siniestro, ha respondido que únicamente hubo una "relación temporal" por la cercanía de ambos hechos, pero entiende que no existe una relación de otro tipo. También ha explicado que personal del Instituto de Medicina Legal acudió a actos relacionados con la Visita del Papa, pero ha destacado que "a título personal".
Matías Vicente ha señalado que el día del siniestro estaba de guardia con el juzgado número 21 de Valencia y ha señalado que se enteró del accidente "por una doble vía", por una parte por el propio órgano judicial y, por otra, por una llamada del 112.
Durante su comparecencia, ha indicado que, tras el siniestro, se desplazó, en calidad de médico forense de guardia, al lugar del accidente junto a la juez, la fiscal y el secretario judicial, pero cuando llegaron allí todavía el operativo sanitario todavía no había finalizado las tareas, por lo que la comisión judicial aprovechó para ir un bar cercano a comer algo.
Una vez en el túnel donde ocurrieron los hechos, ha señalado que subieron a uno de los vagones. También ha indicado que, posteriormente, acudió otro médico forense y estuvieron hablando con la Policía Judicial, que fue el cuerpo que se hizo cargo del levantamiento de cadáveres, una posibilidad que existía entonces, aunque ha indicado que actualmente haría falta para ello un "equipo mixto" formado por médicos forenses y policías judiciales.
Matías Vicente se ha mostrado "absolutamente convencido" de que la identificación de cadáveres fue "correcta". En concreto, ha indicado que la mayoría de identificaciones las hizo la Policía Judicial a través de las huellas dactilares, aunque también hubo casos en los que se hizo por parte de los familiares. Además, hubo un reconocimiento por genética y otro por odontograma.
Inquirido por si los reactivos utilizados para la identificación de cadáveres estaban caducados, ha dicho desconocer este extremo, pero ha añadido que confía en que "el personal de la unidad de genética del instituto que hizo los análisis hizo lo correcto". "Jamás he autorizado pruebas caducadas, ni pruebas sino están con todas las garantías tanto legales como técnicas", ha apostillado.
ENTREGA DE CUERPOS
Vicente, quien ha señalado que no intervino en la autopsia del maquinista del metro, ha destacado que la identificación de cadáveres "no costó nada a las familias". También ha explicado que la entrega de cuerpos se hizo en el tanatorio municipal "como se hace siempre" y ha señalado la mayor parte "se entregaron pronto".
No obstante, los diputados han subrayado que tres meses después había restos sin entregar. Sobre este tema, ha respondido que hubo "restos anatómicos que no se pudieron adjudicar a cadáveres concretos", por lo que "se hizo una incineración conjunta" ya que "en aquel momento no había un protocolo" aplicable al respecto.
Por otro lado, ha destacado que no hay un informe completo sobre la actuación del Instituto de Medicina Legal sobre este accidente, sino que únicamente existen "informes parciales de las pericias concretas" que hizo cada forense.
PERSONAL Y MEDIOS
Preguntado por los parlamentarios por si considera que tenían personal suficiente, ha subrayado que "con el que teníamos hicimos lo mejor posible para no añadir ni un gramo más de dolor a los familiares". En cuanto a los medios e instalaciones, ha dicho que "superaban con mucho a la media de toda España y nos podíamos comparar con cualquier centro de medicina legal de toda Europa".
