"Sorprendente y sorpresivo". Así calificó uno de los abogados que participan en el juicio por el accidente del Alvia ocurrido en 2013 en Santiago de Compostela el cambio de criterio del fiscal Mario Piñeiro al retirar la acusación contra el exdirectivo del ente estatal Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), Andrés Cortabitarte.
Este letrado, que representa a un matrimonio que perdió a su único hijo en la tragedia, en ese momento estudiante de Medicina, y en la que también falleció su novia, criticó la modificación de las conclusiones realizada por el ministerio público al considerar incomprensible "que si algo se puso de relieve" en las distintas sesiones del juicio ha sido "un afianzamiento y ampliación de las pruebas incriminatorias contra el señor Cortabitarte, responsable de la seguridad de la línea".
"Una decisión desconcertante e injustificada ya que, para mayor perplejidad de los presentes, se adhirió (la Fiscalía) a todos los escritos de responsabilidad civil propuestos por las partes en ventilación del ámbito indemnizatorio, incluso sin conocer las múltiples modificaciones provisionales practicadas por las acusaciones personadas que se propusieron con posterioridad", enfatizó.
"Cuando mínimo dan muestra de una actuación arbitraria y motivada, dicho sea de la manera más respetuosa", sostuvo el abogado de esta familia dirigiéndose a la magistrada María Elena Fernández Currás.
Al igual que hizo este letrado, otros abogados que intervinieron en la sesión celebrada en la mañana de este martes se adhirieron a la asociación de perjudicados Apafas y a la plataforma de víctimas para solicitar la sentencia condenatoria tanto del exdirectivo del Adif como del maquinista, Francisco José Garzón Amo, como autores de un delito de homicidio por imprudencia grave al considerar acreditada su responsabilidad en los hechos que se les imputan.
Otro de los abogados que participó en la sesión celebrada en la mañana de hoy representaba a una mujer que perdió a sus padres, ambos jubilados, en el accidente ferroviario y que se vio obligada a trasladarse a Madrid desde Gran Canaria, donde residía, para hacerse cargo de su hermano, enfermo de cáncer y que estaba al cuidado de sus progenitores y que finalmente falleció.
En su intervención, el letrado consideró, a diferencia del criterio de la Fiscalía, que "el comportamiento" del exdirectivo del Adif "sí merece reproche penal".
"Él era en ese momento director de Seguridad de la Circulación del Adif y no cumplió con las funciones que le competían. No existió una valoración integral de riesgos en el tramo, autorizó la desconexión del sistema ERTMS sin haber realizado una evaluación de los riesgos que ello conllevaba y sin haber implementado medida alguna de seguridad, como sería la instalación de balizas o la colocación de señalización específica u otras medidas de protección", consideró.
Además, este abogado recordó que Cortabitarte intervino como perito en el también trágico accidente del Metro de Valencia que se saldó con 43 muertes y que en su declaración ante el tribunal reconoció que este siniestro ocurrido en el año 2006 "se habría evitado con la mera instalación de una baliza limitativa de la velocidad y, en cambio en este caso no lo hace ni tomó las medidas oportunas para evitar o mitigar el daño causado".
"La línea no era segura porque trasladó el riesgo únicamente al comportamiento del conductor del tren y, por tanto, esa extrapolación o transmisión del riesgo no es suficiente en modo alguno para que sea el conductor el único responsable", apostilló.
Tras la fase de conclusiones, el juicio por el accidente del Alvia finalizará previsiblemente el próximo día 27 de julio, aunque la sentencia no se conocerá hasta finales de año.