La orden de los Hermanos Fossores de la Misericordia nació hace 69 años en Guadix (Granada) como la única del mundo dedicada a atender a los muertos y rezar por los vivos, un cumpleaños que celebran con la gratitud de sus vecinos y un deseo de supervivencia pese a ser cada vez menos frailes.
Fray José María de Jesús Crucificado fundó esta congregación en Guadix el 11 de febrero de 1953, una orden que desde entonces se ha encargado de velar por el cementerio, acompañar a las familias en su duelo y ofrecer consuelo.
El alcalde de Guadix, Jesús Lorente, ha felicitado a los Fossores por este aniversario, cerca de siete décadas acompañando a los vecinos desde la oración y el recogimiento.
Esta orden única en el mundo mantiene su presencia en los cementerios de Guadix y Logroño, aunque también veló en otras épocas por los camposantos de Jerez de la Frontera, Huelva, Vitoria, Pamplona y Felanitx (Mallorca).
"Queremos agradecer la dedicación de los Hermanos Fossores durante todos estos años, no solo por el excelente trabajo que desarrollan en el cementerio, sino sobre todo por la extraordinaria labor de acompañamiento que hacen", ha resumido Lorente.
El marrón del hábito de estos frailes se ha convertido durante estos 69 años en la imagen con la que el cementerio accitano recibe a las familias que van a despedir a un ser querido, a las que acompañan durante los entierros.
Además, la congregación compagina las horas de rezos, misas, rosarios con la atención al cementerio de Guadix, el arreglo de los nichos y los jardines.
